Tamara Falcó ha reaparecido este jueves en ‘El Hormiguero’ después de pasar unos días completamente alejada de las cámaras. A menos de un mes para darse el ‘Sí, quiero’ con Íñigo Onieva, parece que la colaboradora está más ocupada que nunca.

Este jueves por la noche ha confesado que "he estado en Nueva York con mi madre" y que "el vestido está quedando súper bonito". Pablo Motos le ha preguntado si Isabel Preysler ha dado su visto bueno y ha contestado que "sí", además lo ha hecho "con entusiasmo".

Nuevos detalles sobre el vestido de novia

Además, Tamara ha desvelado que tiene a "diecinueve personas" trabajando en su vestido, en los encajes en concreto, y que está encantada con ellos porque "están haciendo lo imposible para terminar este vestido en un mes". Eso sí, parece que la Marquesa de Griñón no tendrá que viajar más a Nueva York porque "no sé si la siguiente es ya en Madrid, me lo tienen que decir ahora".

La prometida de Íñigo Onieva está viviendo esta etapa de lo más feliz aunque ha confesado que "es raro verte vestida de novia" y que cuando se miraba al espejo se decía a sí misma: "'eres la novia', como si se estuviera haciendo todo real".

También se le ha preguntado si lucirá o no velo y ella ha querido jugar al despiste y nos ha desvelado si lo llevará o no: "ah, no lo voy a decir". Tamara no sabe si cumplirá con las expectativas que hay puestas en ella, pero sí que ha confirmado que está muy contenta con el trabajo que el equipo de Carolina Herrera está haciendo con su vestido de novia.