Los pasteleros podrían ser uno de los gremios que más ha avanzado en cuanto a innovación. Han sabido aprovechar el buen producto de toda la vida como base para darle un giro y actualizarlo tanto en sabor como en imagen, creando así productos que difícilmente pasan desapercibidos.

En Zurekin Obrador están constantemente pensando cómo conseguir productos novedosos y el último de ellos ha sido tan arriesgado como exitoso. Han sacado a la venta los famosos donuts con sirope de arce y bacon que triunfan en EE.UU. Pero no se han quedado ahí, ya que han querido ir un paso más allá creando las primeras palmeras con sirope de arce y bacon. "Nunca habíamos visto unas palmeras así. Los donuts sí eran conocidos sobre todo en América, pero en versión palmera no se había dado nunca yo creo", cuenta Laura Cepeda, fundadora de este obrador.

Un mes de pruebas

Sobre el producto, señala que "lo más importante es que el bacon tanto de la palmera como del donut este muy crujiente". Tardaron cerca de un mes en encontrarle el punto bacon y en conseguir que todos los productos encajaran, porque además del sirope de arce y el bacon los donuts y las palmeras cuentan también con cebolla ahumada.

Es, sin lugar a dudas, una apuesta muy arriesgada, aunque Cepada confiesa que está teniendo mucho éxito. "Es verdad que al principio cuando haces cosas tan locas te puedes esperar de todo porque son combinaciones muy atrevidas y les cuesta despegar pero una vez se va conociendo, lo van sacando los foodies y se va viralizando ya despunta", explica.

Aunque Estados Unidos es un referente importante para ellos, confiesan que su seña de identidad es hacer productos grandes, "muy de Bilbao". "Incluso nuestros productos pequeños son grandes, por ejemplo, nuestra palmera de ferrero pesa casi medio kilo", indica.

En Zurekin Obrador se centran en coger como base un producto tradicional y "fusionarlo con la actualidad". En el obrador trabajan bajo pedido, aunque los vizcainos tienen la posibilidad de comprar todos sus productos en la panadería Bagatza, en Barakaldo.