Barikuetako plaza o el mercado de los viernes es el punto donde se cruzan los baserritarras y los clientes en Mungia. Con una larga tradición, este mercado acerca a los vecinos los mejores alimentos que producen. Este espacio de encuentro provee de auténticos manjares cultivados con gran cariño por parte de los baserritarras.

Es un trabajo que requiere de una gran dedicación, en el que apenas hay días libres y en el que la climatología influye de manera directa. Y siempre no ofrecen los mismos productos sino que en función de la temporada, acercan unos u otros. Ahora que se acerca el verano, pronto se podrán saborear esos tomates que saben a tomate y que no han pasado horas y horas en cámaras frigoríficas para evitar que maduren. Y tomates con imperfecciones, porque ninguno se desecha aunque su aspecto sea feo.

Durante años, el Mercado de baserritarras de Mungia ha potenciado ese contacto directo y esa apuesta clara por los productos de kilómetro 0, productos que van de la huerta a la mesa. Y esa es una de las razones para que sea uno de los merecedores de uno de los Km0 Gastronomia Sariak.

Tras unos años en los que la pandemia ha impedido que el tú a tú, tan necesario en el comercio, se pudiera realizar; el fin de las restricciones también ha llegado al Mercado baserritarra de Mungia al que han vuelto todos los productores que han querido y que ha sido muy bien recibido por vecinos y visitantes.

Sin distancias de seguridad y con la posibilidad de despojarse de la mascarilla, el ritmo ha regresado a la plaza de Andra Mari, donde los puestos lucen perfectamente montados y los productores enseñan la producción que han recolectado en las horas previas a acudir a Mungia. Todo ello con el objetivo de que los clientes adquieran esos ingredientes con los que cocinar unas recetas de gran sabor y calidad.