Cuarenta años después, el Getxo volvió a jugar la Copa y, caprichos del destino, entonces cayó en el choque de ida por 0-1 en Fadura frente al Alavés, y este jueves hizo lo propio frente al mismo rival, pero a partido único y por 0-7. Una buena experiencia para la plantilla que dirige Egoitz Garai, que milita en División de Honor, pero demasiada distancia para sorprender a un rival, de Primera División, que jugó a sus anchas ante una adelantada defensa que pronto mostró sus costuras y después todo fue coser y cantar para los gasteiztarras, que se fueron 0-4 al descanso. 

No tuvo piedad el conjunto babazorro. De inicio, la pelea se planteó por un nutrido centro del campo en una sede como Gobela, de tan pequeñas dimensiones y de hierba artificial. El Getxo presionaba muy alto. No quería bromas en su terreno. Lo hacía con dos líneas de cuatro muy marcadas y los hermanos Pradera en ataque. Poco le duró la presión. Por la derecha, con Carlos Vicente nacía todo el peligro. Y desde la derecha salió un buen centro de Ballestero, que remató de cabeza a la red el oportunista Mariano para lograr el primer tanto de la eliminatoria a los siete minutos. Muy pronto. 

El Alavés espantaba cualquier duda. El balón volaba en busca de Ander Pradera, que se intentaba hacer un hueco, sin suerte, entre la defensa gasteiztarra. Arriba disparó Carlos Vicente por dos veces. Los de Eduardo Coudet buscaban cortar pronto la posibilidad de reacción local. Otra vez llegó hasta la cocina Carlos Vicente para toparse con Argoitia en su valiente salida. Parada cabeceó en el segundo palo, pero su asistencia fue neutralizada por la defensa. 

Markel Pradera salió en carrera, lo que mejor sabe hacer, pero la defensa visitante se replegó a tiempo. Iker Torralvo se marcó una delicatessen y Markel Pradera asistió de tacón a Santos, que entraba en el área, pero el Getxo no llegaba a probar, de verdad, la puerta de Raúl Fernández. Antes de la media hora, Carlos Vicente, el mejor de los babazorros, entró por la derecha y su pase al corazón del área lo aprovechó de nuevo el exdelantero del Real Madrid. Y, seguido, un error en la salida de balón lo recogió Rebbach que cedió a Carlos Vicente para marcar con un disparo seco y raso. La diferencia de categoría quedaba reflejada con el marcador (0-3).

Entre Argoitia y el propio Mariano evitaron el cuarto que rondaba el área del Getxo. Llegó en un centro del nueve del Alavés desde la izquierda encontrando a Carlos Vicente, que campaba por la derecha y finalizó con un disparo cruzado.

Sin pisar el freno

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En la segunda mitad, el Alavés no tuvo piedad. Por su parte, para el Getxo fue misión imposible marcar un gol ante su afición. Unai Josu despejó de puños el disparo de Rebbach. El partido tenía menos ritmo. Carlos Vicente centró desde la derecha y encontró a Mariano que selló el quinto. Mariano remataba todo lo que le echaban. Una máquina. Disparó muy cerca del poste el centro de Egoitz Muñoz y por muy poco no llegó al enésimo centro de Carlos Vicente. 

Morcillo solo tuvo que empujar para hacer el sexto tras un envío desde la izquierda de Pinillos. El séptimo lo certificó Toni Martínez con un disparo raso y cruzado dentro del área pequeña.