Los últimos minutos privaron al Barakaldo de una victoria que ya acariciaba ante la Gimnástica Segoviana. De nuevo la recta final del encuentro volvió a castigar a un conjunto fabril que ha perdido nueve puntos a partir del minuto 80 de los encuentros y que acumula ya siete jornadas sin ganar. Este domingo conservaron el empate de milagro ante una Gimnástica que tuvo ocasiones de sobra para igualar antes del minuto 92 y que estuvo muy cerca de llevarse los tres puntos en una recta final con los gualdinegros en la lona.
GIMNÁSTICA SEGOVIANA: Carmona, David López, Yubero (Min. 70, Céspedes), Molina, Abel, Astray (Min. 55, Diego Gómez), Berlanga, Llorente, Farrell, Borrego (Min. 83, Hugo Díaz) y Tellechea (Min. 55, Fernán).
BARAKALDO: Tena, De Jesús (Min. 76, Buján), Aymane, Artetxe, Muguruza, Ekaitz, Pedernales, Huidobro (Min. 85, Borja García), Valiño (Min. 85, Jesús Martínez), Revilla (Min. 65, Isuskiza) y Urki (Min. 65, Luis Bilbao).
Goles: 0-1: Min. 10; Muguruza. 1-1: Min. 92; Diego Gómez.
Árbitro: Morales Moreno (Comité Andaluz). Mostró cartulinas amarillas a Yubero y David López por la Segoviana y a Artetxe, De Jesús y Luis Bilbao por el Barakaldo.
Incidencias: 2.467 espectadores en La Albuera.
El Barakaldo golpeó sin llegar a los diez minutos. Un córner en corto con centro de Urki lo cabeceó Muguruza para poner por delante a los fabriles. La primera mitad no deparó mucho más, bien controlada por los de De la Sota. Un centro de De Jesús que Revilla remató algo forzado fue lo mas destacable ante un conjunto local que solo apareció con un par de disparos lejanos, de Astray y de Borrego, que no vieron puerta.
Tras el descanso, el Barakaldo apareció con un disparo lejano de Pedernales, intentando sorprender a Carmona. A partir de entonces cambiaron las tornas y fueron los locales quienes se impusieron hasta llegar a someter a los fabriles, a quienes el hoy titular Tena les salvó de la derrota. El portero primero detuvo abajo un disparo de Llorente. Después, sacó una gran mano para evitar el tanto de Diego Gómez. También detuvo el disparo de Céspedes desde fuera del área. Con el remate de Diego Gómez a la media vuelta, en el descuento, ya no pudo hacer nada. Todavía tuvo que intervenir otra vez para evitar el gol de Hugo Díaz. Por último, el disparo de Berlanga se fue rozando la escuadra.