La sorpresa ha saltado este miércoles. Matías Lizarazu deja de ser director deportivo del Sestao River una vez que la Junta Directiva de la entidad verdinegra presidida por Ángel Castro haya destituido de su cargo al navarro, su apuesta el pasado junio tras la marcha de Roberto Sáez, que fichó por el Lugo. “Matías, queremos agradecerte el trabajo realizado y desearte toda la suerte del mundo para tus futuros proyectos”, ha señalado la entidad verdinegra, que hasta final de temporada, una vez se decida si mantiene la categoría en Primera RFEF, no comunicará el nombre del próximo responsable de la parcela que deja vacante Lizarazu.
El navarro recaló el pasado verano en Las Llanas después de trabajar en el Grupo San Pablo, conglomerado empresarial con el que llegó al Algeciras y lideró el proceso de conversión del club a Sociedad Anónima Deportiva.
Pero parece que con el paso de los meses Matías Lizarazu fue perdiendo la confianza de los gestores del River. De hecho, alguien externo como Iñaki Zurimendi ha asesorado al club en las llegadas y salidas en el pasado mercado de invierno. Zurimendi ya fue hace una década el máximo responsable de la dirección deportiva del Sestao River, aunque con anterioridad también fuera entrenador del conjunto sestaotarra durante dos etapas. Ha dirigido también al Indautxu, Lemona, Barakaldo, Santurtzi, Amurrio y Laredo, además de ejercer como director deportivo del Barakaldo y Portugalete, al margen del Sestao.