Morcillo desata la tormenta en Burgos

El partido estaba más que complicado, pero una inesperada tormenta de granizo provocó la suspensión del encuentro lo suficiente para que a la vuelta dos chispazos de Jon Morcillo supusieran la igualada para el Amorebieta en casa del talentoso Burgos. Y no sería justo olvidar la gran actuación de Magunazelaia, que una vez más resultó fundamental en el punto conseguido en El Plantío.

Los dos conjuntos llegaban con objetivos diferentes. Al Burgos un triunfo le podría meter en zona de play-off y al Amore la victoria le dejaba en la zona de salvación. Nada más empezar Curro estrelló el balón en el larguero en un centro chut desde la izquierda que tocó en Núñez. Seguido marcó Fer Niño con incertidumbre, ya que el delantero pareció salir en fuera de juego pero una pierna de Etxeita le habilitó. Definió a la perfección evitando a Jonmi y superando casi sin ángulo a la zaga azul. Al cuarto de hora, Gayá evitó el segundo taponando el remate del mismo protagonista. Jonmi tuvo que responder con un gran despeje al disparo de Montiel desde la frontal. El Burgos estaba desatado era un vendaval.

Morcillo centró desde la izquierda y por la derecha entró Núñez, que cabeceó con intención para que Córdoba despejara también de cabeza. Al Amore le faltaba movilidad en ataque para lograr sorprender a la defensa local. No pudo llegar Jauregi al envío desde la derecha de Núñez. Con la ventaja burgalesa los de Bolo contemporizaron su juego y los azules tomaron la iniciativa. Morán remató por encima del larguero. Morcillo disparó desde muy lejos con su zurda y el balón con un bote maldito puso en aprietos al portero. La jugada más peligrosa de los vizcainos llegó sobre la bocina del descanso en un buen disparo de Morcillo, también desde lejos, que despejó el portero, Jauregi tampoco pudo aprovechar el rechace y de nuevo Morcillo finalizó fuera ya dentro del área.

Fuerte granizada

En la segunda parte, el Burgos comenzó golpeando de nuevo. Curro se coló por la izquierda superando a la defensa adelantada y definió a la perfección. Con una intensa granizada en forma de tormenta el encuentro tuvo que suspenderse durante ocho minutos. Jandro se olvidó de la defensa de cinco y cambió a un central por un delantero para arriesgar con un 4-4-2. Dorrio mandó un gran centro desde la derecha que no encontró rematador del Amorebieta. El tercero lo tuvo Fer Niño en sus botas, tras un gran pase de Curro, pero se encontró con la respuesta de Jonmi. 

Entonces llegó el momento loco de Morcillo con dos goles seguidos. El portero local fue a despejar fuera de su área y el balón se le coló por debajo, Morcillo esquinado aprovechó para marcar. Y después recibió un pase por el ala izquierda y llegando a zona de peligro se inventó una vaselina de oro para superar de nuevo a Caro. De un resultado cómodo de los de casa, a punto de sentenciar, se llegó a la igualada visitante. El Burgos intentó la reacción sin tregua en los minutos finales pero se topó con Jonmi. Montiel, Ojeda de cabeza y Ander gozaron de sus ocasiones.