El Sestao River cerró el domingo la décima jornada del grupo I de Primera RFEF con una nueva derrota que acentúa un poco más su pésimo inicio de curso. El 3-0 encajado ante el Tarazona, uno de sus rivales directos en la lucha por la permanencia, duele mucho en la entidad verdinegra y en su masa social, a la que le cuesta digerir la trayectoria decadente de un equipo que no conoce todavía la victoria superado el primer cuarto de la competición de la regularidad y que ocupa la última plaza, con la salvación a seis puntos vista que marca la SD Logroñés. La plantilla está tocada y en el entrenamiento de ayer mañana en el campo de Rivas, en Portugalete, las caras de los futbolistas y los integrantes del cuadro técnico no retrataban precisamente síntomas de alegría. La crítica situación deportiva preocupa y ocupa, una ansiedad que afecta a todo el entorno, consciente, sin embargo, de que toca dejar a un lado la liga por unos días y poner el foco en el estreno del River en la Copa, que tendrá lugar el jueves en Segovia ante la Gimnástica, que ocupa la cuarta posición, en puesto de play-off, del grupo V de Segunda RFEF después de superar ayer en su feudo al San Fernando. Pese a la diferencia de categoría, el colectivo verdinegro asume la exigencia con la que se encontrará en La Albuera si quiere continuar en el torneo del K.O. y esperar a un Primera División en la segunda ronda, que supondría toda una inyección de moral y económica para un club al que no le sobran los recursos.

La plantilla afronta el estreno copero como una especie de liberación de la liga y así lo reafirma Adrián León (Santander, 9 de septiembre de 1989), una de las caras nuevas de este Sestao procedente de La Nucía, con el que compitió la campaña anterior en Primera RFEF. Para el centrocampista cántabro, ya recuperado de una lesión muscular que ha retrasado su debut liguero hasta la séptima jornada, el duelo en Segovia ofrece su punto personal, ya que vuelve a medirse a la Gimnástica en Copa siete años después de la primera vez, por aquellas fechas en las filas del Pontevedra. Un amargo recuerdo, porque el conjunto gallego cayó eliminado al sucumbir por 2-0, una historia que Adrián espera no se repita el jueves. “Me acuerdo que había ido gente de Pontevedra, que era una tarde soleada, que nos apretaron bastante y que nos ganaron con un gol en cada periodo”, expresa el cántabro, quien aguarda un partido parecido al de entonces en La Albuera: “Es un equipo que está arriba, que compite muy bien y que lo que quiere es ascender. La diferencia de categoría no tiene nada que ver, sabemos que cualquier equipo de Segunda RFEF nos puede plantar cara y no se puede ganar a nadie sin bajarse del autobús, ya que nos van a exigir, va a ser un partido complicado y que si no damos el 120%, no vamos a ganar”.

Adrián León, de 34 años de edad y que ha sido titular en tres de los cuatro últimos encuentros del conjunto de Aitor Calle, tiene una pequeña espinita clavada con la Gimnástica, ya que “cuando voy a algún campo me gusta saber si he ganado allí y si no es así, hacerlo por primera vez, como sería en este caso”, al mismo tiempo que reflexiona sobre el alivio que generaría vencer al conjunto segoviano, donde permanecen tres futbolistas –Chupo, Manu y Javi Marcos– que eliminaron al Pontevedra, su exequipo, en agosto de 2017. “Puede ser un buen punto de inflexión si conseguimos una victoria, saber que somos un buen equipo y que estamos haciendo las cosas bien para salir de ahí abajo”, subraya el santanderino, al que le motiva la Copa y esta eliminatoria: “Es un partido muy importante porque luego siempre puedes jugar contra un Primera División, lo que es un aliciente con este formato”.

Junta directiva

No saltan todavía las alarmas

Confianza en el proyecto. La Junta Directiva del Sestao River que preside Ángel Castro y la propia dirección deportiva que lidera Roberto Sáez mantienen cierta calma pese a la delicada situación por la que atraviesa el equipo y siguen sin cuestionar a Ait  or Calle, quien, por su parte, insiste en su confianza en sacar del apuro a un conjunto que no conoce la victoria. Un triunfo que se le resiste y que espera disfrutar el próximo domingo en Las Llanas, aunque la cita se las trae, ya que los verdinegros reciben al filial del Celta, nuevo líder del grupo y que destaca por su juego ofensivo, de hecho es el equipo más goleador.