Todo a una carta se juega mañana domingo en la última jornada de la máxima categoría de juveniles, como es la División de Honor. Los tres partidos con algo en juego se disputarán a partir de las 12.00 horas y de ellos saldrá el último equipo que descenderá a la Liga Nacional, junto con Berceo, Tudelano y Tolosa. Por un lado, el Danok Bat está obligado a ganar en Logroño frente al ya descendido Berceo. Lo mismo le ocurre al Santutxu, que deberá asegurarse los tres puntos en Gobela contra un Arenas que logró la permanencia en la anterior jornada, si no quiere llevarse una sorpresa en caso de que vencieran sus vecinos en la capital riojana.

El tercer equipo que podría verse abocado al descenso es el Gazte Berriak de Ansoain, que disputa su última jornada en Iruñea, en casa de la AD San Juan. El Gazte, igual que el Santutxu, tiene un punto más que el Danok Bat, por lo que deberá intentar vencer a un rival, séptimo en la tabla, ya que un triunfo del equipo de Fika les haría perder la categoría.

Se da la circunstancia de que el Danok Bat, que este año celebra sus cincuenta años de existencia, nunca ha sufrido el descenso de sus conjuntos en equipos en la categoría de juveniles. Son veintiocho años consecutivos en la máxima categoría del fútbol del Estado y, en caso de que fuera el equipo entrenado por Arkaitz Astoreka el que rompiera con la historia, también descenderían su Juvenil B y su Juvenil C, que se encuentran disputando la Liga Nacional y la Liga Vasca.

La calculadora echa humo. En caso de empate a puntos entre Danok y Santutxu descendería el primero. Si empataran a puntos Santutxu y Gazte bajarían los bilbainos. Y en el supuesto de que el Danok Bat y los de Ansoain empataran perderían la categoría los navarros. Si la carambola acabara con un triple empate el que diría adiós a la División de Honor sería también el equipo de Fika.