ZALLA. Tras permanecer durante más de 30 años en categorías estatales, es decir, entre Tercera División y Segunda División B, el Zalla Unión Club, su afición y directiva, ha sufrido de lo lindo en las tres últimas campañas, en las que han vivido tres descensos de manera consecutiva: de División de Honor, a Preferente y, el último, a Primera Regional, en la que milita este año. Pero el pasado mes de agosto, Landaberri comenzó a ver la luz al final del túnel. La llegada del nuevo director deportivo, José Antonio Valle, popularmente conocido como Pitxi, supuso un cambio radical tanto en la plantilla como en el cuerpo técnico del primer equipo, encabezado por el entrenador Aitor Ibáñez, ex del Trapagaran, entre otros clubes. “Hemos diseñado una plantilla, fichando 17 jugadores, con gente muy contrastada en la Regional en todas las líneas. Un equipo muy válido para poder ascender y ganar la liga”, detalla un ilusionado Pitxi.

Ya en pretemporada, los jugadores blanquiazules comenzaron a dar pistas sobre su capacidad enfrentándose a equipos de mucho nombre en la Regional como el San Pedro o el Zamudio. Pero fue el 11 de septiembre cuando la afición de Landaberri se ilusionó por completo. La visita del Bilbao Athletic al feudo zallarra dejó un excepcional sabor de boca al entorno del club pese a la derrota por 0-2.

El partido que los encartados disputaron el pasado domingo en Serralta ante el Lutxana fue la confirmación de lo que se esperaba. Un envite de gran dificultad, debido a las reducidas dimensiones del campo y el empuje del rival, en el que el equipo de Landaberri se impuso con sufrimiento por 2-3. Diez de diez. El conjunto de Ibáñez cuenta la totalidad de sus partidos como victorias, sumando de esta manera 30 puntos de los 30 que ha disputado. La verticalidad y la calidad de los jugadores de ataque, sumando la firmeza y el buen hacer de la parcela defensiva, ha hecho que a estas alturas de temporada el Zalla ya sea líder en solitario del grupo I de Primera Regional, aventajando en nada menos que ocho puntos a su vecino más cercano, el Atlético Aranguren, segundo clasificado. “Son números muy positivos que indican que estamos haciendo bien las cosas. Todavía no hemos tocado techo, por lo que seguiremos trabajando para cumplir nuestro objetivo; ascender y ganar la liga”, admite Pitxi.

Goles con acento guaraní

El Zalla no solo es líder en solitario de la tabla. Es, sin ningún tipo de oposición, el equipo más goleador de la categoría con nada menos que 29 goles a favor, con ocho de diferencia sobre su perseguidor, el Unión Sport San Vicente. El principal culpable de estos registros goleadores tiene nombre y apellido: Juan Ángel Gamarra. El artillero paraguayo lleva nada menos que once goles. Su llegada a Landaberri fue uno de los principales motivos de ilusión para el entorno zallarra. La pasada campaña, su primer curso en el fútbol regional vizcaino, Gamarra se proclamó pichichi de Preferente gracias a los 20 goles que anotó vistiendo la camiseta del Moraza. Tanto él como su equipo tienen esta tarde, en Landaberri, la oportunidad de seguir aumentando su racha ante La Merced y acercarse hacia el ansiado ascenso.