BARCELONA: Ter Stegen; Semedo, Piqué, Lenglet, Alba; Busquets, Rakitic, Arturo Vidal (Min. 71, Aleñá); Dembélé, Messi y Coutinho (Min. 80, Malcom).
VILLARREAL: Asenjo, Mario, Álvaro, Víctor Ruiz, Pedraza; Cáseres, Trigueros (Min. 67, Bacca); Cazorla (Min. 87, Raba), Fornals, Chukweueze y Gerard Moreno (Min. 79, Toko Ekambi).
Goles: 1-0: Min. 36; Piqué. 2-0: Min. 87; Aleñá.
Árbitro: Munuera Montero (Comité Andaluz). Amarilla a Víctor Ruiz, Lenglet, Álvaro, Alba, Fornals y Pedraza.
Incidencias: Camp Nou, 73.003 espectadores. Los jugadores del Barça salieron al terreno con una camiseta y la leyenda Muita forza Rafinha (Mucha fuerza Rafinha). Partido 400 de Ernesto Valverde como técnico de Primera.
barcelona - En el mejor partido como barcelonista de Ousmane Dembélé, el Barcelona resolvió con problemas su enfrentamiento ante el Villarreal con goles de Gerard Piqué y de Carles Aleñá, que de esta manera estrenó su cuenta con el primer equipo azulgrana.
No fue un partido fácil para el conjunto catalán, que necesitaba ganar después de que en los dos partidos anteriores (Betis y Atlético ) los de Ernesto Valverde solo hubieran sumado uno de los seis puntos en juego.
Y le costó mucho al Barça. No es un secreto que le falta velocidad de balón, pero también confianza en su juego. Los rivales, con poco, llegan sobre la meta de Ter Stegen y la fluidez ya no es la seña de identidad azulgrana.
Con el mismo once que ganó hace unos días en Eindhoven sin ofrecer buenas sensaciones, Valverde repitió guión. Su equipo estuvo un poco más sólido atrás, pero con muchos problemas en la creación. La suerte de los locales ayer fue Dembélé, que leyó muy bien el partido. Sin opciones de jugar por la izquierda, donde la dupla Alba-Coutinho tuvo muchos problemas para superar a Mario Gaspar y al rapidísimo Samuel Chukwueze, que le dio aire en defensa y en ataque al equipo de Javi Calleja.
Un centro muy tenso del francés fue rematado por Piqué para adelantar a su equipo (min. 36).
Pero visto que el Barça no estaba fino, el Villarreal decidió adelantar sus líneas unos cuantos metros y los de Javi Calleja tuvieron el control.
Bacca entró por Trigueros y Aleñá por Arturo Vidal, un cambio que no gustó a la grada, pero el escenario no cambió. El Villarreal no llegaba y el Barça, tampoco.
Pero al final, quien decidió fue Messi, en prácticamente la única acción de mérito en el segundo tiempo. Le dio un pase maravilloso a Carles Aleñá y el canterano eligió el mejor momento para marcar su primer gol en Liga con el primer equipo y matar el partido después de batir a Asenjo con un toque sutil. - Francisco Ávila