bilbao - El Atlético de Madrid intentará esta noche en el Vicente Calderón (21.00 horas, C+) lo que parece un imposible: remontar el 3-0 del encuentro de ida al Real Madrid y acceder así a la final de Copa.
El partido disputado en el Bernabéu hizo mucho daño el equipo colchonero. Perdió de forma contundente y apenas tuvo capacidad de respuesta. Además, su contrincante fue mucho más agresivo y afrontó la cita con más estímulo y concentración.
Tres días después, el Atlético cambió de rol y estrenó en Almería su flamante liderazgo liguero. Acabó perdiendo (2-0) un partido que, en condiciones normales, habría ganado sin mayor sobresalto. Y volvió a aparecer el factor arbitral, que no ayudó precisamente al equipo colchonero.
Tampoco lo hizo en el encuentro copero del Bernabéu. ¿Casualidad?
Probablemente. Sin embargo su entrenador, Diego Cholo Simeone, comienza a ver fantasmas. Ayer, en la rueda de prensa previa al encuentro, deslizó sutilmente que a lo peor hay una mano negra detrás de ambas casualidades.
Simeone deduce que su equipo está siendo "incómodo" para algunos, aunque luego invitó a jugadores, club e hinchas a "no buscar excusas".
¿Tiene la impresión de que ahora les está resultando demasiado incómodo a algunos ser tan incómodo?". Le preguntó un periodista en la rueda de prensa. "Sí.... Sí, sí, perfecto", contestó el técnico, que no especificó para quién o quienes, ni habló sobre errores arbitrales. Volvió a ser interrogado por esa apreciación, y añadió: "Siempre dije que quiero que el Atleti sea un equipo incómodo para todos. Y lo estamos siendo. Somos un equipo competitivo. Ya vamos para la jornada 24 y estamos peleando en un lugar que habría que mirar para atrás a ver cuantos equipos había como terceros en discordia en la jornada 24. Creo que pasó mucho tiempo".
Lo cierto es que un equipo tan sólido y competitivo ha encadenado dos derrotas consecutivas y sin marcar un gol. Para el Atlético hoy se trata, más que alcanzar una hazaña, de recuperar las buenas sensaciones y el espíritu ganador, y frente al gran rival madrileño, a quien no vence en el Calderón desde el 12 de junio de 1999.
Las suspicacias apuntan ahora al navarro Undiano Mallenco, el designado para arbitrar el derbi.