El fútbol puede provocar serios disgustos, sobre todo entre los hinchas más acérrimos y recalcitrantes, pero también desata momentos de euforia que dejan marcas indelebles y sus consecuencias.

Eso ha sucedido con el prodigioso Barça que arrasó la temporada pasada, sobre todo en dos fechas muy concretas y de especial relevancia para el seguidor culé. No en vano, con tres días de diferencia, los que trasncurren entre el 2 y el 5 de mayo de 2009, el Barcelona protagonizó dos partidos históricos, ante Real Madrid (2-6) y Chelsea (1-1), que encendieron los ánimos y la libido de los seguidores barcelonistas, como se ha podido constatar nueve meses después al comprobarse que el índice de natalidad se ha disparado en la capital catalana.

Así lo revela un estudio llevado a cabo por Com Ràdio entre varios hospitales y clínicas de la ciudad, que estiman que los nacimientos se han incrementado un 45%.

En una semana trascendental, el Barça arrasó al Real Madrid en su propio estadio y de la humillación consiguiente, además de desencadenar un buen puñado de polvos locos, el conjunto azulgrana prácticamente dejó visto para sentencia la lucha por el título liguero.

Eso sucedió el 2 de mayo, domingo. Tres días después, el miércoles 5 de mayo, el Barça eliminó al Chelsea en su estadio de Stamford Bridge con un espléndido gol de Andrés Iniesta en el minuto 93, en el suspiro final, sin tiempo para nada más, y logró así su clasificación para la final de la Liga de Campeones, en Roma, donde derrotó con autoridad al Manchester United (2-0) para lograr la tercera Copa de Europa de su historia.

El comedido y atemperado centrocampista manchego se quitó la camiseta, preso del fervor y la transcendencia del acto, la zarandeó por los aires y luego clamó: "Ha sido un momento de la hostia". Por lo que parece, el subidón de Iniesta también se propagó por Barcelona, para deleite de la hinchada blaugrana y su actual reflejo en el censo.

Guardiola: "somos máquinas" El entrenador del Barça, Pep Guardiola, asumió ayer con ironía y buen humor este dato dado a conocer por la emisora catalana. "Parece que generamos eso. En este caso, podríamos achacarle los nacimientos al gol de Iniesta. Somos unas máquinas", añadió.

Aún sorprendido por la noticia y por las cifras, Guardiola celebró "que la gente se anime" cuando el Barça gana. "Si al cabo de nueve meses la natalidad crece, es algo bueno, según los políticos, ¿no? Bienvenido sea. Pero insisto, el responsable es Iniesta".