En línea con el crecimiento de la extrema derecha en Europa, Vox pasa de cuatro eurodiputados a seis, a los que se suman los tres de Se Acabó la Fiesta (SALF), que encabeza la sorpresa de esta campaña, el agitador ultra Luis Pérez, conocido como Alvise Pérez. El próximo eurodiputado, que ha enarbolado un discurso antiinmigración, antifeminista y contra los políticos tradicionales y los periodistas, llega a Bruselas tras obtener 800.000 votos, un 4,58% del total.
“No vengo a reformar nada, vengo a reventar el sistema”, ha prometido durante la campaña este analista y consultor político sevillano de 34, que ahora comparte espacio ultra con Vox, a quien no resta votos. Y es que los de Santiago Abascal también mejoran sus resultados de 2019.
En concreto, Vox cosechó este domingo más de 1,6 millones de votos, un 9,62%, un resultado superior al logrado en las elecciones europeas de 2019, cuando obtuvieron más de 1,3 millones de sufragios, el 6,2%. Con este resultado provisional, se aseguran seis asientos, tres más que los que tenían hasta ahora, porque el cuarto llegó postBrexit.
Vox, no obstante, no mejoró sus datos respecto a las elecciones generales del 23J, cuando lograron más de tres millones de votos, el 12,39%.
El triunfo de ‘Alvise’
El otro triunfador fue el líder de la agrupación de electores Se Acabó la Fiesta, Luis Alvise Pérez, que irrumpió como sexta fuerza política en el Parlamento Europeo con tres diputados, `prometió “mano dura” contra la corrupción y la “partitocracia”
“España se ha convertido en la fiesta de los criminales, de los corruptos, mercenarios, pedófilos y violadores”, expresó Pérez, minutos después de conocer estos resultados, en un evento celebrado en una discoteca de Madrid.