Parece que el sector de la construcción va a ser el motor que impulse la economía durante 2021. ¿Cómo ve este pronóstico?

- Más que hacer un pronóstico podemos referirnos a la constatación de una realidad. El carácter estratégico de la industria de la construcción ya se vislumbra como uno de los pilares de desarrollo de la economía, con un notable incremento en actividades como la rehabilitación, las promociones de vivienda y, aún con un lento avance, en la obra pública. Somos prudentes al hacer estimaciones, especialmente porque la incertidumbre está presente en todos los sectores, pero a la vista de lo que está activándose en la industria de la construcción, comprobamos que se percibe un mayor dinamismo en la actividad y un relanzamiento de proyectos.

¿Qué perspectivas ve desde Eraikune de cara a la generación de empleo en este sector?

- La industria de la construcción comenzó el año 2020 con buenas expectativas de empleo. A partir del comienzo de la pandemia, y entre los meses de abril a septiembre, se llegaron a superar los 1.400 desempleados de aumento en un mes respecto a mismo del año anterior. A partir de octubre los datos mejoraron en cuanto a descenso de desempleo, ya que se empezaron a generar puestos de trabajo, especialmente en aquellos proyectos ligados con la construcción de infraestructuras.

¿Le preocupa la falta de perfiles cualificados?

- Es un problema real. Actualmente sólo un 10% de los contratos tienen la categoría de peón, el resto es personal de distinta cualificación. Además, las obras cada vez están más mecanizadas y se multiplican los requisitos técnicos, con lo que es necesario un mayor número de especialistas. También, la introducción de las TIC, las nuevas tecnologías, la exigencia de nuevas habilidades o la incorporación de determinadas herramientas y soluciones están cambiando el perfil del mercado laboral. Podríamos hablar de un nuevo paradigma laboral generado por la arquitectura avanzada y la construcción 4.0.

El sector se encamina cada vez más hacia el campo de la construcción industrializada. ¿Cómo se implementa este avance en realidad?

- Será lento pero inexorable. Hay estudios que señalan que la construcción industrializada supone la reducción significativa de las emisiones de CO2 en su ejecución. Igualmente, comporta una disminución del consumo de agua en su fabricación y mantenimiento, y ofrece grandes posibilidades para el reciclaje y la reutilización de los materiales empleados.

Uno de los retos del sector es la integración en la economía circular, la sostenibilidad... ¿Puede ampliar esta idea?

- La construcción sostenible hace tiempo que está en el argumentario de la industria de la construcción porque se es consciente de que estamos ante el eje fundamental para la promoción de la Economía Circular como base para el desarrollo social y económico del entorno. En Eraikune, en los procesos de reflexión con nuestros socios, hace tiempo que nos planteamos como retos fundamentales la mejora de la eficiencia energética y la transición ecológica, así como la profundización en la economía circular.

¿Cree que también hay que innovar más en el sector, e invertir en I+D+i para desarrollar materiales más sostenibles, procesos más tecnológicos, etc.?

- Sin lugar a dudas, sí. Actualmente estamos por debajo del 1%, pero las empresas del clúster sí están invirtiendo en investigación y desarrollo, aproximadamente un 1,2%. Que también se aleja de los objetivos que se marcan para la comunidad autónoma vasca, que está en torno al 2%. Hay mucho recorrido para acercarnos a otros sectores más intensivos en este apartado.

¿Qué van a suponer las ayudas europeas de Bruselas (Euskadi Next) para su sector?

- Los fondos Next Generation Europe y sus derivados locales, como el Euskadi Next, buscan impulsar una recuperación económica, social y medioambiental. Desde Bruselas se ha entendido que, por ejemplo, la rehabilitación energética puede generar ese tipo de desarrollo.

¿Cómo ve el desarrollo actual de las infraestructuras en Euskadi? .

- Las empresas constructoras que principalmente se dedican a obra pública mantienen cierta prudencia porque la situación no es buena, debido a ciertos retrasos en la ejecución y adjudicación de algunos contratos. De ahí la solicitud a las instituciones para que realicen un incremento decidido de la licitación pública independientemente de la llegada de fondos europeos.

El número de empresas asociadas a Eraikune ha ido creciendo. ¿Cómo repercute en ellas o beneficia esta asociación?

- Representamos a 123 empresas de la industria de la construcción, que facturan aproximadamente el 50% del total del sector en Euskadi. Los perfiles de las empresas del clúster son, por un lado, aquellas que se dedican al diseño, arquitectura e ingeniería. Luego hay un bloque muy importante que son las promotoras y constructoras. También hay empresas que se dedican a la rehabilitación, a la gestión y al mantenimiento de edificios o infraestructuras. Y en todo este entorno hay compañías que desarrollan tecnologías de la información y la comunicación (TIC) ligadas con el sector de la construcción, los centros tecnológicos, las universidades y la administración pública, sin olvidarnos de las empresas de materiales, importantes en la generación de valor del sector.