LA conectividad es un fenómeno imparable en el que Euskadi se encuentra inmersa, un proceso de transformación que atañe a todos los ámbitos, desde el empresarial hasta las administraciones públicas y la ciudadanía en general, y que representa grandes oportunidades para crecer como país. Su implantación, los retos a los que se enfrenta el País Vasco para conseguirlo y cómo protegerse de los riesgos que implica el mundo digital han sido algunas de las cuestiones debatidas en el recién celebrado Encuentro DEIA: Conectividad, herramienta básica para la transformación digital.

La cita, encabezada por la consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras del Gobierno vasco, Arantxa Tapia, ha estado compuesta por Javier Zorrilla, director Territorio Norte de Telefónica; Lourdes Moreno, CEO de Bolueta Engineering; y Ander Beldarrain, CEO de Laussan, ejerciendo de moderador el director de DEIA, Iñaki González.

Las altas capacidades de conectividad con que cuenta Euskadi, a merced de la empresa y de particulares ha sido el marco de inicio del debate.

El máximo responsable en la zona Norte de Telefónica, Javier Zorrilla, se ha mostrado satisfecho de la situación que ocupa Euskadi en términos de conectividad en comparación con el resto del Estado español, fundamentalmente de fibra. Zorrilla sitúa a Euskadi entre los tres primeros países del mundo, junto a Corea y Japón.

A su juicio, la conectividad es la herramienta clave para conseguir la transformación digital. Durante su intervención argumenta que, "la base sobre la que se va a construir la digitalización en Euskadi en términos de territorialidad, velocidad, etc, es de primer orden". Para alcanzar dicha transformación, lo primero es estar convencido de que lo vamos a conseguir, además de tener la capacidad económica que requiere el proceso.

La importancia de la inversión es, sin duda, uno de los aspectos que destaca Zorrilla, al cual Telefónica ha destinado 130 millones de euros aproximadamente en el despliegue de la instalación de fibra. En el mismo apartado destaca también las ayudas económicas realizadas por el Gobierno vasco para conseguir que todos los ciudadanos de Euskadi puedan acceder al mundo digital. En este despliegue de medios, el papel de Telefónica ha sido fundamental.

Las actuaciones del Ejecutivo vasco dejan ver también el compromiso que existe por parte de los poderes públicos en promover y apoyar la transformación digital como palanca de crecimiento socioeconómico de país. En palabras de la consejera, si bien la apuesta por la digitalización ha llegado de la empresa privada, el acompañamiento y asesoramiento de la pública para poder llegar a todas las zonas de Euskadi, incluso a las más alejadas y rurales, es una de las medidas adoptadas.

Para Tapia, esta estrategia de expansión tiene dos objetivos. Por un lado, que toda la actividad económica que se puede dar en una gran ciudad, se pueda generar en las mismas condiciones en las zonas rurales; para que, de esta forma, se alcance el segundo de los objetivos, que no es otro que el equilibrio territorial.

Para la sailburu, el objetivo del gobierno es que todas las zonas de Euskadi, las más rurales y las más urbanas, tengan el mismo acceso a la fibra, a las comunicaciones y a la conectividad.

Acercar la fibra prácticamente al 100% del territorio ha sido un reto para el Gobierno vasco, que según la consejera ha sido posible también gracias al apoyo recibido por la empresa privada.

Preguntada por la vocación de futuro, Tapia se muestra tajante al afirmar que es la de continuar. "Cuando Euskadi esté totalmente digitalizada, daremos el salto para implantar el despliegue del 5G". Apoyándose en la teoría de que la conectividad va a ser el futuro, y por tanto, un factor de desarrollo para Euskadi, la reflexión de la consejera es que Euskadi tiene que estar en la vanguardia en cuanto a transformación digital.

Respecto al peso de la conectividad en Laussan, empresa especialista en la distribución de recambios para coche, su director ejecutivo, Ander Beldarrain, cree que si bien resulta una herramienta clave, es además un elemento que les diferencia de la competencia. "El peso es tal que cualquier fallo que tengamos respecto a la conectividad nos para la empresa", señala el CEO de la compañía, una afirmación que toma peso al conocer que el 30% de la facturación de la empresa se hace a través de Internet. Con 48 talleres repartidos por todo el Estado y Portugal, conectados entre sí y con los clientes, la digitalización es el pilar de Laussan. A diario se conectan a la empresa 3.000 clientes para informarse de sus productos, conocer su stock y realizar sus compras. La dimensión de la conectividad alcanza por tanto a todos los ámbitos de la empresa, desde el área comercial hasta la de atención telefónica. Para Beldarrain, "conectividad es rentabilidad y eficacia para la empresa".

Pero no hay que olvidar tampoco que la falta de conectividad puede poner en riesgo el desarrollo de la actividad empresarial, una responsabilidad que recae en compañías como Telefónica. Preguntado por la presión que dicha responsabilidad puede acarrear a la compañía, Javier Zorrilla expone su visión. "Por un lado somos fabricantes y constructores de redes, y por otro, damos servicio a los usuarios, tanto a empresas como a particulares".

Por ello, "en Telefónica añadimos una capa de valor en nuestras redes y ofrecemos a las empresas soluciones sobre la nube que llegan de la mano del Big Data, la inteligencia artificial y/ o la realidad virtual, entre otras"

En lo que atañe a la conectividad de Bolueta Engineering, empresa de ingeniera que se encarga de la fabricación de piezas, su CEO, Lourdes Moreno, argumenta que se trata de un aspecto que tenemos interiorizado en la organización. "Tenemos más que asumido que hoy en día hay que estar conectado con los clientes, aunque también somos conscientes de que en este tema nos queda mucho camino por recorrer".

Pese a ser una empresa pequeña, formada por 80 personas, Bolueta Engineering ha estado inmersa los últimos tres años en una auténtica revolución tecnológica. No obstante, la cabeza visible de la empresa incide que si bien la mayoría de nuestros clientes son empresas grandes, muchas de ellas todavía no están en la fase de conectarse para realizar, por ejemplo, las compras a través de la red.

Bajo esta percepción de mercado, Moreno recalca la importancia de los datos a la hora de tomar decisiones. Curiosamente expone que, a pesar de que cuando Bolueta Engineering cayó en sus manos hace 3 años la empresa estaba anclada en el siglo XIX, existían datos sobre su proceso productiva. Aunque no se utilizaban, la empresa contaba con toda esa información. En los últimos 3 años, las cosas han cambiado mucho en Bolueta Engineering. "Algunos ejemplos de ese cambio es que hemos empezado a trabajar con Business Inteligence, término que hace referencia al uso de estrategias y herramientas que sirven para transformar información en conocimiento con el objetivo de mejorar el proceso de toma de decisión en una empresa. Además estamos trabajando en la conectividad con nuestros clientes y también en la digitalización de nuestra gestión básica".

Lourdes recuerda que esta transformación se está produciendo muy rápidamente y aprovecha para recalcar que una pyme tiene mucho que mejorar en el proceso de transformación digital aunque sea en trabajos básicos, y aboga en la defensa de que la digitalización le va a permitir crecer en producción y servicios sin tener que crecer en otros departamentos como los relativos a la administración.

La CEO de Bolueta Engineering defiende a su vez la idea de una empresa tiene que crecer en aquello que le genera valor y para el resto debe de tirar de tecnología.

Especialización Al hilo de lo expuesto hasta el momento, el director de DEIA en su papel de moderador del encuentro introduce otro tema al debate, lanzando tanto a la directiva de Bolueta Engineering como al CEO de Laussan la pregunta sobre cuál es el grado de especialización que requieren sus estructuras para sacar el máximo rendimiento a los datos y a la información de la que disponen, así como a las tecnologías de conectividad que están incorporando en sus procesos de trabajo.

Desde el ámbito que representa la empresa que dirige Lourdes Moreno, dedicada al diseño de piezas de metalurgia, considera que el proceso de digitalización de la empresa es clave. En su caso, apunta, "hasta el momento y quizá por la precariedad tecnológica que teníamos en la empresa hemos optado por externalizar todo lo relacionado con la nube, la conectividad? . Sin embargo, ahora nos estamos planteando desarrollar una plataforma propia para poder trabajar desde dentro de la organización".

El caso de Laussan es distinto al de Bolueta Engineering. Para Ander Beldarrain, debido a la ausencia de desarrollos tecnológicos dentro de nuestro sector, nos hemos visto forzados a dar el paso e introducir herramientas avanzadas. "Poniendo la mirada en nuestros 13.000 clientes, no nos quedaba otra opción que dotarnos de herramientas inteligentes para darles respuesta de manera inmediata".

Pero la apuesta tecnológica de Laussan no solo ha estado dirigida a los clientes sino también al personal de la empresa. "A través de estas herramientas que hemos ido desarrollando nosotros mismos hemos conseguido que aunque estemos vendiendo en 40 puntos diferentes, el personal de Laussan disponga de toda la información de los clientes vía on line", señala Beldarrain.

Pero si bien el mercado obliga a optar por la digitalización y la conectividad, Beldarrain opina que el camino desarrollado hasta el momento se presenta cada vez más complicado para llevarlo a cabo en solitario. "Se necesitan cantidad de recursos y disponibilidad que muchas empresas no tienen".

Por su parte, la representante de Bolueta Engineering apunta a que no queda otra opción más que pensar en crecer y "crecer sin la catapulta que hoy en día te ofrece la tecnología es una mala gestión".

Tras lo oído hasta el momento, Iñaki González define el panorama que están describiendo los cuatro expertos muy distinto al de hace años, que implica a su vez muchos cambios. El relativo al personal o al equipo humano de las organizaciones es uno de los ellos.

En esta valoración sobre los cambios humanos, Beldarrain introduce el término reskilling, que no es más que el reciclaje profesional del trabajador para que adquiera competencias tecnológicas con el objetivo de desempeñar de forma correcta su trabajo teniendo en cuenta los agentes tecnológicos que se hayan incluido en el proceso.

Todo el proceso de una empresa por mucha tecnología que introduzca va a tener que ser realizado por personas pero si es cierto que faltan nuevos perfiles digitales. Es aquí donde se presenta otro reto, la captura de talento, una necesidad sobre la que, en palabras del directivo de Telefónica, el Gobierno vasco está asumiendo con acierto.

Para Zorrilla es necesario importar talento y conocimiento de startups.

En este sentido, la representante del Ejecutivo autónomo apoya la opinión de Zorrilla que Euskadi necesita más personas con conocimiento, lo que en su opinión, "requiere ser aún un país más atractivo para que esas personas que vengan se queden entre nosotros".

La consejera de Desarrollo Económico del Gobierno vasco no quiere pasar por alto un tema que en su opinión resulta muy relevante y que tiene que ver con dos elementos que considera críticos. El primero tiene que ver con el hecho de que introducir la digitalización, la conectividad y todo este tipo de elementos tiene que perseguir un objetivo claro; buscar una mayor competitividad, mayor producción, mayor satisfacción de los clientes, en definitiva, buscar una ganancia. El segundo de los elementos que señala la sailburu es el tema de los datos. Hoy en día accedemos a cantidad de datos pero lo importante es saber cuáles son interesantes para la empresa y cuáles se pueden aprovechar. Para saber realizar esta selección, es fundamental conocer muy bien el modelo de negocio de cada organización.

Bajo la perspectiva de la empresa que ve en la conectividad y la digitalización un eje central para el desarrollo futuro de los negocios, Iñaki González pregunta sobre la posición que está adoptando Telefónica. Javier Zorrilla argumenta que la posición de la compañía en relación a la transformación digital es la misma que tienen el resto de las empresas pero "la diferencia está en que el proceso lo desarrollamos a un ritmo mucho más rápido".

Define la organización que representa como la avanzadilla de la transformación digital y subraya que, "todos los adelantos tecnológicos tienen que ver con la innovación básicamente".

Para Zorrilla, estamos ante un momento que abre grandes oportunidades a las compañías en términos de innovación y destaca como el futuro apunta hacia un modelo de economía y de estrategia predictiva, es decir, "apoyarnos en la cantidad de datos que hoy tenemos, para predecir el futuro". En su opinión, aquí está el verdadero reto para las pymes, "ya que partiendo de esta estrategia la pequeña empresa va a poder superar la inflexibilidad de tienen las grandes compañías". Corrobora que "las pequeñas empresas tienen ante sí una gran oportunidad para crecer apoyándose en la innovación y la tecnología. No hay más que ver lo que está pasando, en estos momentos quienes están haciendo cosas nuevas son startups y pequeñas empresas".

Continuando con el entramado empresarial de las pymes, el de mayor peso en Euskadi, Zorrilla subraya que su gran reto en estos momentos es el uso de Internet para trabajar comercialmente, una afirmación con la que está de acuerdo la consejera. Tapia argumenta que cuando se realiza el análisis de digitalización en Euskadi, el ámbito donde peor situados estamos es en la parte de la utilización de internet para hacer compras.

Para el director del territorio Norte de Telefónica es también sumamente importante buscar soluciones tecnológicas que se adapten a cada proceso productivo.

medidas de orientación El entorno de conectividad y de transformación digital al que se enfrentan las empresas vascas está siendo abordado por el Ejecutivo autonómico con la puesta en marcha de medidas de orientación y de acompañamiento. Uno de los ámbitos de orientación ha sido el de la especialización en el campo de la fabricación avanzada, un sector al que el Gobierno vasco está dirigiendo sus esfuerzos. A partir de la creencia de que somos un país productor y que queremos seguir siéndolo, aunque sea de manera diferente, el Gobierno vasco ha definido su Estrategia de Especialización Inteligente RIS3 centrándose en la especialización productiva con base en el tejido industrial y las capacidades tecnológicas de Euskadi.

Aunque en palabras de la sailburu "se ha hecho mucho en cuanto a digitalización e implantación de tecnología en el sector de la fabricación avanzada todavía queda recorrido" y añade que, "el mayor riesgo que tenemos en este momento es que las grandes compañías no sean capaces de trasmitir a sus clientes lo que van a demandar de cara a futuro para que tanto las compañías como proveedores y clientes puedan predecir las demandas".

Desde Bolueta Engineering entienden la fabricación avanzada como la aplicación de conocimiento, experiencia y tecnología en sus procesos. Su CEO, pone sobre la mesa varios ejemplos sobre los que están trabajando en la actualidad, mirando el futuro hacia técnicas novedosas relacionadas con la predicción y sensorización, las cuales permiten anticiparse a posibles incidencias o errores en activos y procesos de producción a través de diferentes tecnologías.

En el caso de Laussan, su implicación ha ido incluso más allá, al desarrollar herramientas tecnológicas innovadoras que les permite trabajar más con menos esfuerzo. Algunas de ellas tienen nombre propio como es el caso de CELPEL, plataforma electrónica que incluye catálogo y pedidos on line; LGT, aplicación de gestión de taller; y Datatecnic, listado de averías frecuentes amplio y útil.

Beldarrain expone que cerca de un 70% de los pedidos de los clientes lo servimos en la primera hora, una inmediatez que exige estar dotado de herramientas que permitan acceder a todo el input del cliente.

Todas las declaraciones realizadas hasta el momento en el Encuentro DEIA muestran la virtud de la hiperconectividad hacia el exterior.

A la cuestión de qué respuestas da Telefónica a la demanda continua de las empresas, sale a la palestra otro de los grandes temas del momento, el 5G.

Zorrilla señala que para llegar al 5G tenemos que garantizar que la fibra llegue al 98% del territorio vasco y el 4G hasta los 120 megas. A partir de estos baremos, "todos estamos muy esperanzados con la llegada del 5G, ya que sus principales características tienen que ver con la mayor velocidad y capacidad y con el hecho de no tener latencia". En su opinión, sobre este tema todavía hay mucho que aprender. "Estamos explorando casos de uso para darle un sentido comercial al 5G, es decir, que tenga detrás un plan de negocio estructurado para que toda la industria, gobiernos incluidos, seamos capaces de que su despliegue sea eficaz y cumpla su propósito".

A estas alturas del debate y como no podía ser de otra manera salta a la mesa de debate el término ciberseguridad, considerado como el lado oscuro de la digitalización. Todos los presentes al Encuentro afirman que en algún momento de sus vidas han sido objeto de algún ataque cibernauta. "Ninguno estamos libre de ellos", puntualiza Zorrilla, y aprovecha para alabar la labor que está haciendo Telefónica para poder dar soluciones a los usuarios de las redes. Esta búsqueda de soluciones es una nueva vía de negocio para Telefónica. Zorrilla afirma que en la actualidad, casi el 50% de nuestra facturación en administración pública y grandes clientes llega de la nube, infraestructuras, seguridad, etc.

En palabras de la consejera del Gobierno vasco, "no somos conscientes de los vulnerables que somos; de toda la información que llevamos y del mal uso que hacemos de Internet" y advierte sobre la necesidad de concienciar a la población de las necesidades que aporta la red pero también de sus riesgos. Para conseguirlo, la formación de los trabajadores tiene que ir en esa línea. Tapia considera que es la primera revolución que ha llegado más tarde al tejido productivo que a la sociedad en general, "lo cual implica que los vicios de la mala utilización en la parte social los hemos llevado a la empresa".

Continuando en términos de seguridad, el director de DEIA quiere saber hasta que punto las empresas están preocupadas por el hecho de poder ser invadidas por los ataques y si creen que hay respuestas a esa preocupación. En el caso de Bolueta Engineering, su CEO cuenta como actualmente es una de las apuestas que está llevando a cabo la empresa, invertir en protección.

La actividad de Laussan, volcada al exterior, lleva a Beldarrain a señalar que los peligros a los que están expuestos son muchos y llegan todos los días. Añade que los riesgos están en todos los lados, trabajadores incluidos, y resalta la vulnerabilidad a la que están expuestas las empresas.

Javier Zorrilla argumenta que el hecho de que la exposición al mundo digital sea cada vez mayor, implica a mayores riesgos. Añade que existen soluciones para evitar los ataques dirigidos a una compañía concreta, pero destaca que muchos de ellos son ciberataques globales que están en la red.

Zorrilla afirma que es necesario invertir en seguridad, ya que los ataques son un riesgo real a los negocios y también un riesgo a los ciudadanos. Recalca que la ciudadanía tiene que saber que las redes de un gran operador son mucho más seguras que las de los servidores locales que cada uno tiene en su casa.

Para romper con esta manera de pensar, el Gobierno vasco cree que hay que apostar por la concienciación de la ciudadanía y sensibilizarle que tiene que protegerse y que ante una situación de alarma, conocer las herramientas, que las hay. Tapia subraya, que en la medida de sus posibilidades, el Gobierno vasco está introduciendo programas para protegernos y concluye afirmando que, "en estos momentos en Euskadi estamos conectados y eso es lo importante".