Ante el éxito de los programas de ayudas para la compra de vehículos de menos emisiones, Euskadi ha decidido ampliar en 2 millones el presupuesto del que depende del Gobierno vasco, dirigido a coches de todo tipo de tecnologías, y ha pedido al Ejecutivo español que haga lo mismo con el MOVES III, centrado en la adquisición de eléctricos. Según ha explicado esta mañana el consejero de Industria, Transición Energética y Sostenibilidad, Mikel Jauregi, el lunes se concedió la ayuda número 1.584 de este último programa y se ha cubierto ya todo el presupuesto. De hecho, actualmente hay una lista de espera de 2.000 solicitudes.
Con la ampliación de su presupuesto, el departamento de Industria espera poder cubrir la demanda estimada en su propio plan renove –llamado Vehículos de Menos Emisiones–, cuyo plazo se ha ampliado al 15 de octubre. “Ha sobrepasado todas nuestras expectativas”, ha señalado Jauregi. El plan contaba inicialmente con 5 millones de euros, pero esa cifra también se ha cubierto. Hasta ahora, el Ente Vasco de la Energía (EVE) ha recibido un total de 2.014 solicitudes, ha resuelto favorablemente 1.463 y ha abonado 1.433. La mayoría de las que ya se han aceptado –un total de 1.110– han sido para la compra de coches de gasolina.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, el consejero ha elogiado un programa “pionero a nivel europeo” basado en la neutralidad tecnológica y ha instado a la Comisión Europea a tomar el liderazgo en el avance de la descarbonización del transporte mediante esta vía “generando así nueva demanda y actividad económica que permita potenciar el sector de la automoción”.
Neutralidad tecnológica
La lógica de la neutralidad tecnológica es que todas las tecnologías contribuyen a la descarbonización. Así, siguiendo esta premisa, el programa del Gobierno vasco ayuda con hasta 3.500 euros la compra de vehículos de todo tipo menos contaminantes. La intención del departamento de Industria es rejuvenecer un parque de vehículos con 14 años de media al sustituirlos por otros nuevos que emitan menos emisiones. Pueden acogerse a este programa todos aquellos ciudadanos que tengan un coche de más de 20 años de antigüedad (contando desde su primera matriculación) o que emitan más de 175 gramos de CO2 por kilómetro (g/km) en el caso de los coches y más de 200 g/km en el caso de las furgonetas y que quieran sustituirlo por uno nuevo. Asimismo, el requisito es que las nuevas adquisiciones emitan menos de 125 g/km (coches) y 150 g/km (furgonetas) de CO2.
En línea con las exigencias del sector de la automoción, que atraviesa una profunda crisis por la transición al vehículo eléctrico, la presión regulatoria y la desaceleración de la demanda, la Comisión Europea está analizando modificar la norma que prohibirá la venta de vehículos de combustión a partir de 2035. Según Faconauto, desde que entrara en vigor el plan Vehículos Menos Emisiones el pasado abril, las matriculaciones se han incrementado un 31,6% en Euskadi, muy por encima del crecimiento medio estatal del 18,9%.
Además, la CAV se sitúa entre las comunidades con una mayor penetración de vehículos electrificados, con una cuota del 20% del total de su mercado en el primer semestre de 2025 y una mejora interanual del 98,4%. “La apuesta por la movilidad eléctrica y por las tecnologías menos emisoras de CO₂ sitúa a Euskadi en la vanguardia de la transición energética y la lucha contra el cambio climático a nivel europeo”, se ha felicitado Jauregi.