Los primeros bonitos de la campaña 2024 han llegado hasta los puertos vascos y en la jornada de ayer lunes la cofradía de pescadores San Pedro de Bermeo recibió 6.500 kilos de esta especie capturados por el pesquero bemeotarra Izurdia Maitea en aguas del Atlántico. La flota cacera de los puertos de Bermeo y Hondarribia inició el pasado mes de mayo la pesquería del atún blanco-bonito del norte pero hasta la jornada de ayer todas las capturas habían sido descargadas en puertos de Asturias y Galicia, por su proximidad con los caladeros de pesca. Para la jornada de mañana se anuncia la entrada de otra embarcación en Bermeo con cerca de 10.000 kilos de bonito.
Más de la mitad del pescado subastado ayer lunes en la cofradía de Bermeo, 3.634 kilos, correspondió a ejemplares con un peso superior a 7 kilos cuya cotización en lonja osciló desde los 9,86 euros de la partida más cara hasta los 8,20 euros de la más barata. Por otra parte, 2.358 kilos de bonito mediano, de entre 4 y 7 kilos el ejemplar alcanzó una cotización que varió desde 8,50 a 7,50 euros el kilo.
Precio medio
Una partida de 293 kilos de bonito pequeño, de menos de cuatro kilos, se vendió a unos 4 euros en tanto que unos ejemplares de atún moja o patudo se cotizaron entre 6 y 4,5 euros el kilo. Con todo, el precio medio de los 6.552 kilos de atún subastados ayer en Bermeo se situó en 8,18 euros el kilo. El bonito es una especie que en esta época del año completa una migración trófica que le lleva desde el Atlántico hasta el Cantábrico y Golfo de Bizkaia con el propósito de alimentarse. Así, si las primeras capturas se produjeron muy lejos de las costas vascas, a unas 200 millas al nordeste de las islas Azores, en pocas semanas los cardúmenes de atún blanco se han desplazado hacia el este y en la actualdidad la flota pesquera desarrolla su actividad a unas 70-90 millas al norte-noroeste del Cabo Matxitxako. Esta circunstancia ha provocado que la flota pesquera vasca de bajura que participaba en la campaña de anchoa haya decidido abandonar esa pesquería para cambiar de sistema de pesca y prepararse para iniciar la costera de bonito.
De hecho varias embarcaciones guipuzcoanas ya se han hecho a la mar con el propósito de llenar sus viveros del cebo vivo que emplearán posteriormente en la pesca del bonito. Dada la proximidad de las zona de pesca se espera que en los próximos días y semanas se produzcan las primeras entradas importantes de bonito en Euskadi.