El Tesoro Público colocó ayer martes 5.035,03 millones de euros en deuda a corto plazo, en el rango medio previsto, y lo hizo ofreciendo rentabilidades más elevadas por las letras a 6 meses y por las letras a 12 meses, según los datos publicados por el Banco de España. Tras tres meses de descensos, el Estado vuelve a pagar más por colocar sus emisiones.

La mejora de los intereses ofrecidos, en línea con las últimas subidas de los tipos de interés por parte del BCE este año, mantuvo el apetito inversor de los mercados por los títulos españoles, ya que la demanda conjunta de ambas referencias casi ha llegado a duplicar lo adjudicado, con unas solicitudes de 9.235,42 millones de euros.

En concreto, el Tesoro colocó 985,03 millones de euros en letras a seis meses, frente a una demanda de 2.650,28 millones, y ofreció una rentabilidad marginal del 3,688%, por encima del 3,635% de la emisión previa.

En la subasta de letras a doce meses el organismo dependiente del Ministerio de Economía adjudicó 4.050 millones de euros, con unas peticiones de 6.585,14 millones por parte de los inversores, y el interés marginal se colocó en el 3,359%, superando el 3,314% anterior.

Pese a elevar la remuneración ofrecida a los inversores por ambas referencias y al incremento respecto a la evolución de los últimos meses, el interés no alcanza los niveles máximos en una década.