El sindicato LAB abogó ayer martes por que el independentismo vasco “aproveche” las negociaciones relacionadas con la formación de un nuevo gobierno en España para poner freno a la estatalización de la negociación colectiva y “blindarla” en Euskadi, así como para exigir la transferencia de la Seguridad Social.
La coordinadora general de LAB, Garbiñe Aranburu, expuso en una conferencia de prensa en Bilbao la estrategia del sindicato abertzale en el nuevo curso político y social. Así, señaló que el independentismo va a ser “decisivo” en la formación del nuevo gobierno español, por lo que defendió “aprovechar esa fuerza” para dar pasos en favor de la construcción del Marco Vasco de Relaciones Laborales y Protección Social.
Entre las medidas concretas que considera que EH Bildu debiera defender en una eventual negociación con dicho fin, destacó la de “poner freno a la estatalización de la negociación colectiva” y que se reconozca el derecho “a negociar y decidir” en Euskadi las condiciones laborales sin injerencias estatales.
Además, estima que “toca agilizar” la transferencia a Euskadi de la Seguridad Social y valorado la posibilidad de que en esa eventual negociación se pueda lograr un acuerdo para incrementar el Salario Mínimo (SMI).
La dirigente de LAB mencionó también que el contexto político ofrece otra posibilidad de impulsar cambios políticos con la convocatoria de elecciones autonómicas vascas el próximo año. Según indicó, las elecciones locales de mayo han evidenciado la capacidad de los trabajadores para “castigar a quienes hacen política a favor de la patronal” –en alusión, sin citar, al PNV– y para “reforzar” a quien tiene en cuenta las reivindicaciones de los trabajadores, en referencia, también sin mencionar, a EH Bildu, que aumentó su respaldo electoral.
Para LAB, el nuevo curso va a ser “continuación” de los anteriores y el sindicato seguirá impulsando “luchas” en los centros de trabajo y en los sectores en defensa de los derechos de los trabajadores. La central abertzale “se esforzará” también para combatir la actual división sindical, al considerar que beneficia a la patronal, y trabajará por la formación de “intersindicales” lo más amplias posibles entre quienes coincidan en unos objetivos mínimos.
LAB promoverá, asimismo, alianzas con otros agentes sociales, feministas, pensionistas o jóvenes, y defenderá ámbitos de colaboración entre organizaciones de la izquierda independentista vasca. Respecto a los contenidos, el sindicato centrará su actuación en los próximos meses en reclamar mayores salarios, de manera que se garantice el poder adquisitivo de los trabajadores.
