El Gobierno vasco cerró el ejercicio 2022 con un déficit del 0,1% y un endeudamiento de 10.822 millones de euros, lo que equivale al 12,7% del PIB vasco, según los cálculos provisionales hechos públicos este viernes por el Departamento de Hacienda. La deuda viva a fecha de 31 de diciembre de 2021 fue de 1.172 millones de euros, una cantidad que supera en cerca de 400 millones la que había al cierre de 2020.

Respecto a los remanentes de tesorería disponibles, a 31 de diciembre del año pasado ascendieron a 1.482 millones –en 2021 fueron 1.800 millones–, de los cuales en el primer trimestre del año 2023 se han empleado para financiar el presupuesto de este ejercicio 488 millones, por lo que quedan disponibles 994 millones.

Además de pagar parte del presupuesto de este año, estos remanentes son usados a lo largo del año para los créditos ampliables o para hacer frente a nuevas necesidades para las que no exista dotación. Los datos reflejan una ejecución (lo que efectivamente se ha gastado de lo presupuestado inicialmente) provisional del Gobierno vasco, organismos autónomos y Osakidetza del 95%, y la ejecución consolidada de los capítulos de inversión al 74%. Los dos departamentos que más han ejecutado han sido los dos más gastadores: Salud el 100% y Educación el 98%, mientras que el que menos ha ejecutado ha sido Lehendakaritza, un 71%.

Las medidas para combatir y paliar los efectos de la pandemia en 2022 ascendieron a 322 millones –de ellos 167 millones Osakidetza y 66 de Educación– con lo que desde 2020 el Gobierno vasco ha dedicado 1.725 millones al luchar contra el coronavirus y sus consecuencias. Por último, el periodo medio de pago en 2022 en la Administración General a sus proveedores fue de 22,5 días.

Comunidades

En total, la deuda del conjunto de las administraciones públicas del Estado cerró el ejercicio 2022 en 1,502 billones de euros, lo que supone un incremento de 75.305 millones respecto al año anterior, aunque redujo su peso sobre el PIB hasta el 113,2%, situándose por debajo del objetivo del Gobierno español, de acuerdo con los datos publicados también este viernes por el Banco de España.

Catalunya (84.327 millones de euros), Comunitat Valenciana (55.032 millones), Andalucía (37.870 millones) y la Comunidad de Madrid (34.821 millones) siguieron concentrando al cierre de 2022 dos tercios de toda la deuda en manos de los gobiernos autonómicos, aunque también obedece a una cuestión de población. A continuación, figuran las comunidades de Castilla-La Mancha (15.520 millones), Castilla y León (13.322 millones), Galicia (11.977 millones), Murcia (11.395 millones), Euskadi (10.822 millones) y Aragón (8.957 millones).

Cierran la tabla Islas Baleares (8.874 millones), Canarias (6.516 millones), Extremadura (5.137 millones), Asturias (4.217 millones), Cantabria (3.378 millones), Nafarroa (3.158 millones) y La Rioja (1.615 millones). No obstante, en porcentaje del PIB, la Comunitat Valenciana, con un endeudamiento que supone el 44,4%, sigue encabezando a las regiones más endeudadas en relación a su riqueza, seguida de Castilla-La Mancha, con el 33,4%, Catalunya, también con el 33,4%, y la Región de Murcia, con el 32,2%.