Los empresarios vascos afrontan este fin de año con cierto pesimismo respecto a la evolución del empleo en Euskadi en los próximos meses a la vista del impacto negativo que el rebrote de la pandemia de coronavirus está teniendo en la actividad económica. En este sentido, el empresario vizcaino Iñaki Garcinuño, presidente de la organización Cebek, adelantó ayer su temor de que en 2021 "muchas empresas vascas tendrán que adaptar su producción a las ventas, a la baja, lo que conllevará inevitables ajustes en el empleo".

El mensaje del dirigente empresarial vasco de Cebek verbaliza el temor a que las restricciones de movilidad y su efecto en sectores tan importantes para la economía como el turismo, la hostelería o la aeronáutica generen, como ya está sucediendo, la necesidad de presentar Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) para recortar plantilla con la consiguiente elevación de las tasas de paro en Euskadi, una vez finalizados los ERTE en vigor.

En previsión de la tormenta que se avecina, el presidente de Cebek defiende el modificar la norma por la que se obliga a mantener el empleo durante seis meses a las empresas que se acogen a los beneficios de un ERTE ya que "a veces es necesario llegar a los despidos" para "mantener la supervivencia de las empresas y el resto de empleos". En una entrevista en Euskadi Irratia, Garcinuño señaló que las empresas "están manteniendo el empleo", pero "a veces no es posible", ya que son las ventas y los clientes de las compañías las que "mantienen" los puestos de trabajo.

En este sentido, el mensaje del empresario vasco está en línea con el ultimo informe del Banco de España en el que se reconoce que la mitad de las empresas del Estado español están con una rentabilidad negativa este año y se teme que entre un 6 y un 10% de las empresas no sobreviva a la crisis derivada de la pandemia.

Adaptarse a la producción

Iñaki Garcinuño indicó que aunque los datos del paro "no sean malos" hasta finales del presente año, gracias, entre otras cosas, al mantenimiento de un "instrumento muy bueno" como los ERTE, en 2021 muchas empresas vascas posiblemente tendrán que "adaptar la producción a sus ventas", lo que conllevará "ajustes" en el empleo.

El representante del empresariado vizcaino aseguró que las empresas están manteniendo el empleo, "porque para nosotros la gente es muy importante", aunque lamentó que "algunas veces es imposible".

"Parece que el último trimestre no va a ser malo, pero creo que, tras acabar el año, las empresas verán cuáles son los números y los datos de todo el año, y como no son buenos, seguramente eso traerá consecuencias en el empleo, eso significa que veremos ajustes", reiteró Garcinuño.

El empresario vasco señaló que, aunque el periodo de los ERTE concluirá el próximo mes de enero, cree que la medida continuará "unos meses más", pero que espera que se modifique, "porque al final lo más importante es salvar las empresas, para salvar el empleo".

Iñaki Garcinuño destacó que la situación en sectores como la aeronáutica, la construcción o el comercio es "grave".

El presidente de Cebek advirtió de que la Comunidad de Madrid es "un agujero negro" para Euskadi por sus "buenas condiciones fiscales y económicas", e instó a reflexionar sobre la posibilidad de modificar el Impuesto de Patrimonio vasco.