Las instituciones vascas podrán llegar a un déficit del 3,5 % este año gracias a que al aumento del 2,6 % para el Gobierno vasco pactado en julio con el Ministerio de Hacienda se suma ahora un 0,9 % específico para las diputaciones forales, a las que por primera vez se les reconoce una capacidad de endeudamiento propia.

La Comisión Mixta de Concierto Económico, reunida este miércoles de manera telemática por la pandemia de covid-19, también ha fijado el déficit para 2021 en el 3 % para el conjunto de instituciones vascas: un 2,2 % para el Gobierno vasco y un 0,8 % para las diputaciones.

Ello se traduce en que las instituciones vascas contarán en dos años con algo más de 4.500 millones (2.311 este ejercicio y 2.205 el siguiente) para compensar la caída de la recaudación y hacer frente a la crisis económica causada por la pandemia. De hecho, el consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, ha dicho tras la Comisión que confía en que el dinero del déficit compense en su mayor parte la bajada de ingresos por impuestos.

En concreto, el Ejecutivo podrá incurrir este año en un déficit de 1.716 millones y de 1.617 millones en 2021, cantidades que en el caso de las diputaciones son de 595 y 588 millones respectivamente. En el caso de los territorios históricos el reparto se hará en función de los coeficientes horizontales, de manera que Bizkaia podrá disponer de un déficit anual de alrededor de 300 millones, Gipuzkoa de unos 200 y Araba de algo más de 90.

Las diputaciones tienen intención de compartir con los ayuntamientos esos recursos adicionales, aunque cada una usará su propia fórmula y aún no han determinado qué cantidad destinarán a las entidades locales, que tendrán que devolver el dinero que reciban.

En la Comisión Mixta de hoy también se ha acordado que el objetivo de deuda pública del Gobierno vasco sea del 16,3 % este año y del 16,9 % el que viene, lo que supondría poder alcanzar los 10.821 millones en este ejercicio y los 12.440 en el siguiente.

"El valor del acuerdo es enorme, porque sienta un precedente. Es un antes y un después" porque reconoce de manera "permanente" que las diputaciones tienen capacidad de endeudamiento. Todo ello constituye "un hito" y "un espaldarazo" al régimen propio de financiación de Euskadi, ha valorado tras la reunión de la Comisión el consejera de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu.

Azpiazu se ha referido también a la suspensión de las reglas fiscales por parte de Europa para 2020 y 2021 que permitirán a las instituciones vascas manejar los márgenes pactados hoy "con más flexibilidad". El consejero ha abogado en todo caso por diseñar los presupuestos desde la "responsabilidad fiscal" y con el objetivo de "recuperar la senda de estabilidad".

El diputado general de Bizkaia, Unai Rementeria, ha anunciado que mañana mismo hará llegar a Eudel-Bizkaia una propuesta sobre cómo "compartir" con los ayuntamientos ese dinero adicional, que "no tapa todas las heridas pero ayuda bastante".

Ha explicado que la cantidad que finalmente se entregue a los municipios dependerá de cuánto caiga la recaudación (el Consejo Vasco de Finanzas se reúne el 15 de octubre para hacer la estimación definitiva) y de los remanentes con los que cuenten los ayuntamientos ahora que pueden hacer uso de ellos.

El diputado de Hacienda de Gipuzkoa, Jabier Larrañaga, -que ha acudido en lugar del diputado general, Markel Olano, en aislamiento por el posible caso de covid de un familiar- ha avanzado que el dinero del déficit se destinará de manera prioritaria a la promoción económica y a las políticas sociales, y ha anunciado la próxima convocatoria del Consejo de Finanzas del territorio para estudiar cómo hacer llegar a los ayuntamientos parte de esos recursos.

También el diputado general de Araba, Ramiro González, tiene intención de convocar el Consejo de Finanzas provincial para escuchar las necesidades de los ayuntamientos y en función de ellas estudiar cómo dotarlos de más capacidad financiera. Ha valorado además que este es un "acuerdo histórico" que permitirá a las diputaciones "afrontar el futuro con recursos propios, sin pedir nada a nadie".