Casi el 30 por ciento de las empresas del metal de Bizkaia, el sector más importante del territorio con unos 48.000 trabajadores, se verán obligadas a reducir su plantilla por la crisis del coronavirus.

La Federación Vizcaína de Empresas del Metal (FEVM), la patronal que agrupa al sector, celebrará esta tarde su asamblea anual de forma telemática. Antes de la misma, la nueva presidenta de FVEM, Tamara Yagüe, ha presentado una encuesta realizada entre sus empresas asociadas que confirma la gravedad de las consecuencias de la crisis del Covid-19.

Así, para el 90 % el mercado está en situación de estancamiento, recesión o fuerte recesión. Sin embargo, para el mes de junio, el 42 % de las empresas espera que el mercado se reactive hasta un nivel de actividad que alcance entre el 50 y el 75 %.

Una visión que se acompaña de una cartera de pedidos débil o muy débil para el 77 % de las empresas y una reducción significativa de las inversiones para lo que queda de año.

En los primeros meses de 2020 la facturación ha bajado en torno al 30 por ciento, aunque para el 48 % de las empresas las exportaciones se han mantenido o incrementado su nivel. Según Tamara Yagüe, esto refuerza "la necesidad de mantener el esfuerzo en la internacionalización de nuestras empresas".

Los datos del estudio afirman que las herramientas que más han utilizado las empresas para afrontar esta situación han sido los avales del ICO, las moratorias o aplazamientos tributarios y los préstamos Covid-19 para pymes que puso en marcha el Gobierno Vasco en colaboración con Elkargi.

Para los próximos meses, esperan contar con apoyos para poder mantener la actividad como programas de activación de consumo, mayores subvenciones públicas, medidas que permitan disponer de mayor liquidez y la demanda de ampliar los ERTE de fuerza mayor "al menos hasta el mes de diciembre".

Más adelante, dos de cada tres empresas prevén recuperar su actividad en un plazo de entre 6 y 12 meses.

En cuanto al sector de la automoción, la mitad de las empresas están en fuerte recesión, con un descenso en los pedidos para el 94 % de las mismas, no esperando recuperar su actividad hasta pasados más de 12 meses.