Euskadi iba camino de alcanzar en marzo una cifra histórica en cuanto a afiliados a la Seguridad Social, pero la crisis sanitaria del coronavirus truncó ese dato y ahora debe mantener una actividad económica mínima para poder recuperar a las personas en paro al mercado laboral "a lo largo de 2020".

Según ha explicado en declaraciones a Radio Euskadi el director de Lanbide, Borja Belandia, aún siendo malo el aumento en marzo de la cifra del paro en 10.974 personas en Euskadi, "el dato esperado era peor" ya que la prohibición de los despidos decretada por el Consejo de Ministros ha mitigado ese incremento del desempleo en los últimos días.

Antes del Covid-19, ha explicado, la tendencia en marzo era muy parecida a la del mismo mes de 2019, y así Lanbide auguraba que se iba a terminar el mes con 2.000 parados menos y "estábamos dudando si íbamos a llegar al máximo histórico de cotizantes de la Seguridad Social", ha reflexionado.

Pero la pandemia ha provocado que, además de esas 10.974 personas que se han quedado sin empleo en marzo, haya casi 140.000 afectados por los expedientes de regulación de empleo temporales, cuyo contrato por tanto está suspendido y así no se contabilizan como desempleadas."Son dos realidades diferentes", ha aclarado.

A su juicio, las medidas decretadas en esta situación de excepcionalidad por la crisis sanitaria han condicionado la economía y, así, "habrá que ver cuál es la evolución real cuando se levanten" y por ello "es tan importante que la actividad económica no se pare del todo, porque será mucho más fácil volver a coger velocidad de crucero y recuperar a esas personas de nuevo" para el mercado laboral.

Ha expresado su confianza en la economía vasca, que es "bastante dinámica y demandaba profesionales" en algunos sectores donde faltaba mano de obra para cubrir todas sus necesidades antes del coronavirus, y ha vaticinado que, pasada la alerta sanitaria, las personas en desempleo vuelvan a encontrar acomodo en el mercado laboral "a lo largo del año 2020".

Para llegar a recuperar ese nivel anterior a esta crisis, Belandia ha considerado que habrá que "superar una primer fase de miedo al contacto", en aras a poder levantar sectores como el del turismo, y ha aconsejado realizar "un esfuerzo personal y solidario sobre todo para apoyar a los autónomos y pequeños comerciantes".