Bilbao. El Banco de España obligará a las entidades financieras a eliminar la letra pequeña de los contratos de los productos bancarios con el objetivo de avanzar en la protección de los clientes y promover la concesión responsable de créditos, según se desprende de una circular, la 5/2012 del pasado 27 de junio emitida a las entidades de crédito y proveedores de servicios de pago sobre transparencia y responsabilidad en la concesión de préstamos que publicó ayer el Boletín Oficial del Estado. La letra deberá ser de al menos dos milímetros para que sea legible.

Los bancos sin embargo podrán seguir usando la letra pequeña en los contratos hasta octubre, ya que la nueva circular del Banco de España que les obliga a resaltar conceptos claves en negrita o mayúsculas no entra en vigor hasta entonces. Además habrá que esperar hasta el 6 de octubre para que las entidades estén obligadas a recoger en la cabecera de los documentos previos al contrato un mensaje de advertencia al cliente de que las informaciones resaltadas son "especialmente relevantes".

Hasta esa fecha los bancos podrán seguir actuando como hasta ahora. Desde ese momento deberán utilizar en los documentos de información una letra con un tamaño adecuado, de más de dos milímetros, para que sea fácil de leer. Esta condición deberá regir para productos y servicios bancarios como depósitos, créditos al consumo, préstamos hipotecarios sobre viviendas y negociación de cheques, así como avales, fianzas y garantías, entre otros, según recoge la circular.

intereses y comisiones Otra de las singularidades de la nueva circular del Banco de España es la obligación de que las entidades comuniquen de forma más clara los intereses y las comisiones que aplican habitualmente a los servicios que prestan con mayor frecuencia, aunque esto no se aplicará de forma generalizada hasta enero de 2013.

Cuando se trate de préstamos o hipotecas, además, se deberán incluir datos suficientes para que el cliente pueda calcular su propia capacidad para hacer frente a las obligaciones de pago en el futuro. Y si el préstamo incluye la garantía de terceras personas -avalistas-, éstos deberán ser informados detalladamente de las responsabilidades que asumen. >DEIA