BILBAO. El grupo Almesa-Procalsa, dedicado a la distribución de productos industriales y perteneciente a Tubos Reunidos, ha cerrado un acuerdo con los sindicatos para aplicar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) por el que suprimirá un total de 106 puestos de trabajo, lo que representa un tercio de su plantilla, informaron ayer a Europa Press en fuentes sindicales.
Tras negociar con el comité, la compañía ha reducido en 28 el número de trabajadores que finalmente resultarán afectados por el ERE. Según las mismas fuentes, Almesa-Procalsa planteó el expediente por causas organizativas, técnicas y de producción, puesto que está reestructurando su red de delegaciones para adaptar su presencia en el mercado a la situación económica actual. Por el momento, ha cerrado diez de sus 35 centros.
Los trabajadores afectados percibirán una indemnización bruta de 40 días de salario por año de servicio, con un máximo de 36 mensualidades. El expediente incluye diez prejubilaciones.
Dividendo Por otra parte, Tubos Reunidos confirmó ayer que no abonará el primer dividendo a cuenta del ejercicio 2009, que se pagaría el 10 de octubre, decisión que el Consejo de Administración de la compañía justificó "por razones de prudencia", informó la empresa ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El fabricante alavés de tubos sin soldadura recordó que desde principios de 2009 se aplica un plan especial de actuación para reforzar la actividad comercial y adecuar la producción a la demanda, en medio de la crisis. La decisión se tomó a principios de año.