Wimbledon asistió ayer martes a la cara y la cruz de sus leyendas, cuyo tiempo se agota inevitablemente. Roger Federer salvó un delicado encuentro de primera ronda ante el galo Adrian Mannarino, que se colocó por delante dos sets a uno e hizo surgir las debilidades actuales del suizo. No obstante, el de Basilea se hizo con el cuarto set después de que su rival se lesionara en la rodilla en un resbalón. El francés, al inicio del quinto set, tuvo que abandonar un partido en el que había dado un gran nivel y amenazado seriamente a Federer, que pudo sumar su victoria 102 en la hierba londinense. “Me habría gustado ver qué habría pasado si todo hubiera podido disputarse normal”, admitió Federer, que aseguró que no siente “más presión de la normal” en este Wimbledon ni cree que tenga que ser el último para él. En segunda ronda le espera Richard Gasquet, que también le va a exigir dar una buena versión.

Un resbalón hizo también que Serena Williams se resintiera de su lesión en el muslo y le obligara a retirarse entre lágrimas cuando solo había disputado seis juegos ante Aliaksandra Sasnovich. La estadounidense sigue estrellándose en su intento de alcanzar su 24º Grand Slam, lleva trece intentos baldíos, y el tiempo juega en su contra. En contraste, su hermana Venus, que ya juega por placer, superó la primera ronda con 41 años ante Mihaela Buzarnescu. Fue su 90º triunfo en Wimbledon y su 90ª presencia en un grande.

En una jornada pasada por agua de nuevo, lo que empieza a comprometer el encaje de los partidos aplazados, Carla Suárez se despidió de Wimbledon en la Pista Central con una derrota ante Ashleigh Barty (6-1, 6-7 y 6-1). Como ocurrió en Roland Garros, la canaria estiró lo que pudo su última actuación y exigió lo mejor a la número 1 del mundo. “Creo que el torneo me ha hecho un gran regalo. Lo he disfrutado de verdad. No podría desear nada mejor para un día como este. Mi último partido aquí, contra Ashleigh... Ha sido increíble”, comentó Suárez, que reiteró que su último torneo será el US Open. También jugó su último partido en Londres la holandesa Kiki Bertens, una ex Top 10 que también ha anunciado su retirada para el final de la temporada.

Por lo demás, el día dejó las victorias de Daniil Medvedev, que se vio exigido por el peligroso Jan-Lennard Struff, y Alexander Zverev en la parte baja del cuadro masculino. Feliciano López cayó en su 77º Grand Slam consecutivo y otro veterano, Pablo Andujar, ganó en cinco duros sets al galo Herbert.