A trayectoria de Asier Martínez (Zizur, 2000) sigue la misma velocidad que sus carreras. De menos a más. Comenzó el ciclo olímpico lejos del foco, mejoró poco a poco sus marcas y en estos últimos meses ha realizado un esprint final que le hace rozar con la yema de los dedos la mínima olímpica. Solo necesita mejorar cuatro centésimas para conseguir los deseados 13,32 segundos. Este fin de semana tendrá una nueva oportunidad en el Campeonato de España Absoluto que se disputa en Getafe. La última bala. Un reto mayúsculo que Martínez afronta con los pies en el suelo, sin querer obsesionarse demasiado, y con la idea de disfrutar con una buena carrera que le permita sacar toda la velocidad que tiene en sus piernas.

Esas ganas de alcanzar la mínima ya le jugaron una mala pasada en su anterior intento. Martínez afrontó con entusiasmo la reunión celebrada en Madrid, pero las cosas no salieron como a él le hubieran gustado. “Competí con expectativas, con presión negativa y no di la talla. Hasta ahora lo que me ha funcionado es ir relajado y esa vez no fue así. Es la enseñanza que tengo que sacar”, reconoce el navarro. Y es que tener la mínima olímpica tan cerca es un motivo de ilusión, pero también una presión extra que hay que saber gestionar. “Por un lado, creo que nos estamos obsesionando demasiado con lo que sería la mínima, pero es verdad que los Juegos están ahí y para mí eso sería cumplir un sueño. Es normal obsesionarse o presionarse de esta manera, pero creo que el camino correcto es el que hemos llevado hasta ahora. Correr relajado y que nos llegue hasta dónde nos tenga que llegar”, comenta.

Esa manera de correr es lo que ha llevado a Martínez a aparecer en los primeros puestos del atletismo estatal en unos pocos meses. “Hace cuatro o cinco meses era impensable soñar por esta plaza olímpica y ahora tenemos que disfrutar de este proceso también, con sus cosas buenas y malas”, afirma. Tampoco imaginaba estar midiéndose de tú a tú con nombres como Orlando Ortega y Enrique Llopis. Dos atletas que serán sus principales rivales en el Campeonato de España, aunque reconoce que “Orlando sigue estando a otro nivel, pero seré parte de esa competición”.

Martínez deberá hacer una carrera perfecta para tratar de lograr la mínima olímpica. Es el día a día de los corredores de vallas, una disciplina que solo permite el sobresaliente. “El margen de error es muy amplio y la capacidad de maniobra casi inexistente. Cuando tocas una valla o te desequilibras, hay poco tiempo para recular y hacer lo ideal. Es una carrera corta, pero al mismo tiempo te da para pensar mucho. Te juegas mucho en centésimas de segundo”, reconoce. Así, en busca de la carrera perfecta, una vez más, y volviendo a correr otra vez sin obsesionarse, Martínez buscará acercarse al sueño olímpico.

El apunte

Euskadi mira a las medallas

Amplia representación. El Campeonato de España acogerá una amplia representación de atletas vascos y varios de ellos apuntan a estar en la lucha por las medallas. La jabalina, con Arantza Moreno y Odei Jainaga es una de las principales bazas de Euskadi. La ermuarra y el eibartarra tienen las mejores marcas de esta temporada, además el guipuzcoano llega en un grandísimo momento de forma tras batir, una vez más, el récord de España. Sus principales rivales serán los hermanos navarros Manu y Nicolás Quijera. También es uno de los favoritos a hacerse con la medalla Carlos Tobalina en peso. Tampoco hay que descartar a las guipuzcoanas Malen Ruiz de Azua, en pértiga, y a Teresa Errandonea. La vallista de Irun es la favorita para colgarse al cuello la medalla de oro en los 100 metros vallas y está metida de lleno en la pelea para asegurar su plaza para los Juegos Olímpicos de Tokio.