El Amorebieta no pudo poner la guinda con una victoria a los esperados debuts de Peru Nolaskoain y Sergio Moreno como azules en El Molinón. El Sporting de Gijón, tras verse contra las cuerdas durante una hora larga de partido, consiguió dar la vuelta al marcador y sumar los tres puntos en un encuentro en el que Iñigo Vélez de Mendizabal recurrió al jugador cedido por el Athletic en los últimos minutos.

Con el de Zumaia preparado en la banda para saltar al césped, de hecho, llegó el segundo y a la postre decisivo gol del conjunto asturiano, que puso el 2-1 en el luminoso justo antes de que Nolaskoain se estrenara con su nuevo equipo en el centro del campo. No fue el estreno esperado por el guipuzcoano, quien apenas tuvo tiempo para dejar su impronta en los once minutos que le tocó fajarse sin éxito. Por delante, no obstante, asoman otros dieciocho partidos de liga para intentar ayudar al colectivo a alcanzar una ansiada permanencia que figura a día de hoy a cinco puntos de distancia. Difícil, pero no imposible.

Cuatro meses de competición restan, no en vano, para la finalización de un campeonato en el que Nolaskoain tratará de sumar los máximos minutos posibles para recuperar su mejor versión tras dejar atrás una complicada lesión de tobillo que ha frenado en seco su progresión. Diez meses, ni más ni menos, trascurrieron hasta que el de Zumaia pudo volver a ser citado con el Athletic para un partido oficial el pasado 2 de enero. Mentalmente recuperado y en condiciones físicas de competir con garantías, el guipuzcoano reconoció ayer durante su presentación como nuevo jugador del Amorebieta que "más que el tobillo, que está ahí y lo tengo protegido sabiendo que nunca lo volveré a tener al cien por cien, lo que tengo que recuperar es la caja y el ritmo".

"La cabeza la tengo bastante bien cubierta respecto al tobillo para poder aguantar los noventa minutos de un partido", aseguró el polivalente jugador cedido por el Athletic, quien subrayó que a título individual "quiero volver a mi mejor versión, recuperar las buenas sensaciones y sentirme protagonista y capaz de jugar y aportar". "Mentiría si dijera que no tengo ilusión por volver el año que viene a Lezama y quedarme ya para jugar en el Athletic", advirtió asimismo un sincero y ambicioso Nolaskoain, que tomó la decisión de recalar en el mercado invernal en Urritxe "por cercanía, compañerismo y por el tobillo, porque llevaba tiempo pensando dónde jugar y mi tobillo estaba ya mejor, pero tampoco como para jugármela a ir a un sitio lejano y no poder estar en Lezama en caso de que no funcionara el tobillo".

Respecto a ello, el de Zumaia añadió que "aquí tengo al lado Lezama, sigo manteniendo el contacto y el tratamiento con gente de allí y estoy un poco cubierto en ese sentido". "Sentirme cómodo en un equipo también es importante para poder dar tu mejor versión", remarcó acto seguido el guipuzcoano, que considera al Amorebieta "un buen sitio para crecer, trabajar y ganar". "Tenemos muy buen ambiente dentro del grupo y esa es la base para empezar a ganar", puso en valor también un futbolista que señaló como una de las razones de su apuesta por el Amorebieta el reencuentro con antiguos compañeros en el Bilbao Athletic como Gaizka Larrazabal, Gorka Guruzeta y Óscar Gil.

En cuanto a su posición preferida en el campo, Noaskoain no ocultó que "me siento más cómodo en el centro del campo, porque creo que es donde más puedo rendir, pero a Iñigo ya le he dicho que puedo adaptarme perfectamente a esa línea de cinco atrás y lo último que voy a hacer es quejarme. Si me pone en el campo y encima me quejo, es que no tengo ni idea de esto".IMPOTENCIA

El domingo, en El Molinón, el nuevo refuerzo zornotzarra sintió "impotencia" y "rabia" como el resto de sus compañeros al saber que "ese tipo de partidos no se nos pueden escapar estando ya en el ecuador de la temporada". "Hay que empezar por ganar este sábado al Girona en Lezama, porque estamos a cinco puntos de la permanencia y es importante ganar ya para engancharnos", lanzó por último Nolaskoain.