Luis Rubiales anunció ayer una serie de medidas para ayudar sobre todo al fútbol aficionado a que pueda mitigar en lo posible el daño causado por la crisis del coronoavirus. Desde una línea de crédito a coste cero de cuatro millones de euros para los clubes aficionados hasta la posibilidad de poder realizar fichas de inscripción gratis para los dos próximos años, además de comprometerse a favorecer el aplazamiento de las deudas con los jugadores.

El presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) lanzó estas medidas tras alcanzar un acuerdo unánime con todos los presidentes de las territoriales al cabo de una reunión telemática. En su afán por buscar soluciones a la crisis desatada por la pandemia también ofreció soluciones al fútbol profesional y animó a LaLiga a que secunde su iniciativa de alcanzar una línea de crédito de 500 millones de euros con los principales bancos del Estado español, con los derechos de televisión como garantía, para que los clubes con dificultades económicas puedan financiase mediante “un pago aplazado en los 4, 5 o 6 años próximos”, dijo, como fórmula para soslayar los ERTE, algo que sin embargo parece inevitable en los clubes de Segunda B y Tercera, con menos recursos económicos.

No tardó Javier Tebas, el presidente de LaLiga, en responder a Rubiales calificando su oferta de “imposible”, ya que que el Real Decreto que regula la venta centralizada de los derechos audiovisuales solo permite su utilización como garantía de financiación para saldar deudas con las administraciones públicas. “Os ha vuelto a pasar como con las pólizas de seguro en una pandemia. Es imposible. Leed la disposición adicional primera del RD 5/2015 de venta centralizada de TV”, escribió Tebas en redes sociales.

Rubiales también puso el énfasis en que lo primero es acabar con la pandemia y solo entonces se podrá hablar de cuándo se terminan las competiciones. “No queremos hacer cábalas ni pensar en fechas. Una temporada que ha empezado debe acabar, llegar al final sea cuando sea, no nos ponemos plazos y si sobran fechas veremos qué hacemos con la siguiente. Hay que dar la posibilidad a los clubes que pueden subir de ganárselo en el terreno de juego, la otra alternativa, que solo haya ascensos o solo descensos sería tremendamente negativo para todo el fútbol”, opinó.

Sobre la final de Copa, que deben disputar en Sevilla Athletic y Real Sociedad, reiteró su deseo de que se pueda disputar con las aficiones, “aunque no sabemos qué van a permitir o aconsejar las autoridades”.

“La final de Copa se debe jugar con público, aunque no sabemos qué van a permitir las autoridades”

Presidente de la RFEF