LOINTEK GERNIKA BIZKAIA: Cornelius (3), Bjorklund (8), Roundtree (8), Colhado (12), Buch (10) -cinco inicial- Lo (9), Díez (0), Arrojo (12), Ivanovic (11), Ginzo (2), Ariztimuño (10).

CLARINOS LA LAGUNA TENERIFE: Herrera (4), Nogic (5), Atkinson (13), Taylor (23), Ocete (10) -cinco inicial- Loyd (3), Montenegro (0), Nauwelaers (0), Bettencourt (2).

Parciales: 25-15, 43-36 (descanso), 63-48 y 85-62.

Árbitros: Morales, Carpallo y Martín. Eliminaron a Taylor.

- El Lointek Gernika Bizkaia cerró la primera vuelta invicto en Maloste después de protagonizar su partido más completo hasta ahora por la entidad del rival y por lo que se jugaba. Los 22 puntos de ventaja supusieron un enorme botín ante un rival directo como el La Laguna Tenerife y, además, metieron al conjunto vizcaino como cabeza de serie en la Copa. El Estudiantes sufrió para imponerse al Bembibre, solo lo hizo por dos puntos, por lo que las gernikarras les habría bastado con una ventaja de media docena para eludir en la primera ronda de la Copa a los tres grandes. Pero las de Mario López volvieron a demostrar que su mejoría es evidente y cerraron un resultado muy meritorio que les dio el doble premio.

Desde el principio, el Lointek Gernika salió decidido a hacer su parte del trabajo y abrió hueco en el tramo final del primer cuarto gracias a un alto ritmo de juego y al equilibrio con ataque, con Nadia Colhado muy presente en la zona, donde era superior, y buena circulación de balón. Las dos tempranas faltas de Angie Bjorklund podían preocupar al perder esa fuente de puntos, pero del banquillo salió Mima Ivanovic enchufada para meter tres triples y once puntos en menos de cinco minutos ante una defensa que concedía los lanzamientos lejanos. Tras dos tiros libres de Colhado, las locales lograron 18 puntos de ventaja (37-19) cumplidos tres minutos del segundo cuarto.

El objetivo ya no parecía tan lejano, pero era difícil sostener ese flujo anotador. El Tenerife se colocó en una defensa zonal cambiante, más posicional que agresiva, y el Lointek Gernika se atascó porque no interpretó bien los espacios a ocupar. Las canarias, apoyadas en la calidad de Taylor, empezaron a recortar y con un parcial de 4-15 devolvieron la emoción al duelo. Esther Montenegro se había llevado un fuerte golpe en el cuello que la sacó del partido y la rotación del equipo visitante se vio resentida.

No obstante, su dependencia de Taylor y Atkinson, excelentes en el uno contra uno, acabó suponiendo un problema porque enfrente se encontraron un equipo que contó con ocho jugadoras que anotaron más de ocho puntos. La resistencia del Tenerife llegó hasta la mitad del tercer cuarto, convertido a ratos en un correcalles de gran desgaste físico en el que el Lointek Gernika puso los últimos cimientos de su victoria con un parcial de 8-0 hasta el 63-48. Nogaye Lo había tenido un día cruzado, pero tras el balonazo que se llevó Colhado la pívot mallorquina tomó el protagonismo en la zona.

Ella, Itziar Ariztimuño, Rosó Buch, Belén Arrojo y Bjorklund formaron un quinteto que Mario López no tocó en el último cuarto y que fue un calvario para las tinerfeñas. En defensa, aceptaron los cambios de asignación y cerraron todos los caminos a un equipo que anotó su único triple en el inicio de último cuarto. Y en ataque, explotaron el juego sin balón para conseguir muchas ventajas cerca del aro, sobre todo por parte de Arrojo, que anotó sus doce puntos en esos diez minutos y fue indetectable para el rival. La ventaja gernikarra llegó a los 20 puntos cuando quedaban aún cinco minutos y ya era cosa de no bajar la tensión por si el Estudiantes lograba una victoria más abultada. Pero no ocurrió y el Lointek Gernika Bizkaia festejó un resultado, el cuarto triunfo consecutivo, que premia su progresión después de una primera vuelta con altibajos. Pero el objetivo de ser el mejor de los mortales se ha conseguido y desde la semana que viene la segunda mitad de la competición se podrá encarar con la ambición intacta.

objetivo cumplido

Mario López valoró “el gran desgaste físico” que hizo su equipo ayer y destacó la importancia de la cuarta plaza no por lo que supone de cara a la Copa, sino porque “tras las dudas del inicio y una complicada primera vuelta, el equipo ha mejorado mucho en el último mes y medio, desde la derrota en Donostia, y en los últimos cuatro partidos hemos hecho un muy buen juego”. Rosó Buch, por su parte, admitió que el Lointek Gernika quiso “salir a tope” por lo que pasara en el duelo ante el Estudiantes “y luego no hemos querido levantar el pie. Estamos muy contentas porque hemos demostrado que somos un buen equipo y siempre es mejor evitar en la primera ronda a los grandes”.