- Las competiciones de baloncesto están paradas desde el 8 de marzo, pero Rafa Pueyo no ha dejado de trabajar para preparar la próxima temporada que se presenta incierta y exigente. El director deportivo del Bilbao Basket agradece el buen comportamiento del club en estas semanas de pandemia y confía en que eso sirva para retener a una buena parte de la plantilla que tan excelente rendimiento ha dado.

Imagino que no es este un momento sencillo para desarrollar el trabajo de dirección deportiva.

-Es verdad porque hay mucha incertidumbre y no sabemos en qué circunstancias se va a poder desarrollar la próxima temporada. Pero estamos trabajando con la idea de que se pueda jugar completa y con cierta normalidad y queremos hacer la mejor plantilla para disputar dos competiciones, que va a ser un reto para el equipo y para el club.

¿Cuál es la posición del Bilbao Basket en el mercado ahora mismo?

-El mercado está muy parado, muy raro, por esa incertidumbre y los clubes no sabemos con qué recursos vamos a contar. Una de las cuestiones que están en todas las conversaciones es que la temporada vaya a comenzar a puerta cerrada o con menos público de lo habitual y todo eso supone una merma de ingresos y, por tanto, todos estamos con dudas. La mayoría de los clubes van a reducir su presupuesto y los jugadores tienen un caché y les cuesta ver la posibilidad de que sus salarios se reduzcan. Hay que esperar a ver cómo queda todo para saber qué ofertas lanzar.

¿Puede el Bilbao Basket sufrir menos que otros clubes por partir de una posición más modesta?

-No lo sé, creo que el Bilbao Basket está haciendo bien las cosas en las últimas temporadas, estamos siendo solventes a nivel económico y cumpliendo con nuestros compromisos. Sabemos cuál es nuestra realidad y pienso que tenemos la ventaja de que sabemos movernos con un presupuesto bajo. Eso puede ser una ventaja sobre clubes que estaban acostumbrados a gastar mucho y ahora tengan que reducir bruscamente sus recursos. Desde mi parcela estoy contento con cómo ha llevado el club esta situación, cómo ha tratado a los empleados, a los jugadores y estoy convencido de que en el futuro podremos seguir creciendo.

Lo que sí parece es que ahora mismo es tiempo de certezas más que de apuestas por todas las partes.

-Los jugadores, desde luego, están buscando estabilidad. La incertidumbre que tenemos los clubes también la sienten ellos. Algunos esperan a ver cómo se mueve el mercado, pero otros están firmando rápido una oferta porque más vale pájaro en mano. Si tienes claro que te interesa un jugador, ya sea por renovarlo o por ficharlo, hay que hacer una oferta cuanto antes para ver si él está en esa idea de querer amarrar un contrato cuanto antes.

Ahora mismo hay ligas paradas, otras canceladas, y citas como el draft de la NBA o las ligas de verano están en suspenso. ¿Esto influye a la hora de seguir al jugador, de rematar operaciones, son momentos que decantan la balanza hacia el sí o el no?

-Realmente, el trabajo de seguimiento durante la temporada está muy adelantado y en esos finales de temporada puedes comprobar de qué pasta están hechos esos jugadores que te interesan en los partidos importantes, pero el perfil que buscas ya lo tienes orientado de antes.

Después de lo que ha pasado el Bilbao Basket en los últimos años es clave recuperar la confianza. ¿La renovación de Mumbrú es un mensaje en ese sentido?

-Nuestra idea es tratar de mantener lo que está funcionando bien, no hacer demasiados cambios. Que el entrenador que ha llevado estas dos temporadas a cumplir los objetivos por encima de lo esperado continúe a mí me da confianza y supongo que también a los jugadores, al entorno y también a los agentes de los jugadores, que ven que últimamente estamos haciendo las cosas con criterio y que hemos alcanzado el éxito porque Álex ha conseguido que los jugadores rindan a un nivel muy alto.

Mantener este unión entre la dirección deportiva y el banquillo supone un plus a la hora de configurar la plantilla.

-Sí, Álex y yo tenemos mucha comunicación y sintonía porque hay cosas que vemos de igual manera en lo que respecta al baloncesto. Esa confianza y respeto hace que trabajemos bien juntos y vayamos en la misma línea.

Ha sorprendido, seguramente por el momento escogido, el anuncio de que el Bilbao Basket va a disputar la Basketball Champions League. ¿Qué puede aportar ahora mismo al club?

-Cuando se toma una decisión así se valoran muchas cosas, no solo lo deportivo. A nivel económico el club ha pensado que puede ser interesante, que puede ayudar y creemos que es una forma de seguir creciendo y de poder acceder a otro tipo de jugadores o de que algunos jugadores que queremos que continúen puedan hacerlo por ese aliciente de jugar dos competiciones. Además, es una oferta de más partidos a nuestro público que puede ser atractiva porque conocerán equipos de otros países. Además, el Bilbao Basket tiene una bonita historia en competiciones europeas y creíamos que era una buena oportunidad para retomar esa senda.

La configuración de la plantilla tiene que variar porque se necesitarán cinco cupos en los partidos de la BCL.

-Sí, pero no tienen que ser cinco fijos dentro de los doce convocados. Puedes inscribir hasta 16 jugadores y no tienen que ser siempre los mismos doce los inscritos en acta. Puedes jugar con esos 16. Nuestra idea es dar la oportunidad a los chicos de la cantera y que alguno de ellos vaya convocado en Europa. La intención es dosificar los esfuerzos entre la Liga Endesa y la BCL, que se pueden dar descansos en la competición europea y repartir los minutos porque tenemos claro que la prioridad seguirá siendo la liga.

La fecha de inicio de la próxima temporada también está en duda y se anuncia la posibilidad de un nuevo rebrote de la pandemia y con ello otro parón. ¿Lo que ha ocurrido con la Euroliga puede influir a la hora de determinar el calendario?

-No lo sabemos, hay muchas dudas. Ojalá a partir de septiembre u octubre podamos competir como siempre, pero hay que ver cómo sigue el tema sanitario para que los gobiernos permitan que haya competiciones deportivas y se pueda viajar entre países para competir en Europa. Espero que el verano sirva para controlar el virus y se pueda volver con normalidad.

La fase final de la Liga Endesa sí se va a disputar. ¿Cómo la van a afrontar los clubes?

-Creo que es algo bueno para el baloncesto y la ACB porque será un indicio de que puede volver esa normalidad. Y cada club la afrontará con sus circunstancias. Hay equipos que han perdido jugadores, otros están al completo, pero está claro que todos tenemos a los jugadores en un estado de forma que no va a ser el mejor después de dos meses parados. Ahora mismo no están preparados para competir al mejor nivel, aunque esperemos que en tres semanas o un mes estén más cerca. Probablemente, no vamos a ver el mejor baloncesto de ninguno de los doce equipos.

Jugar con once o doce jugadores, como ha hecho el Bilbao Basket toda la temporada, va a hacer más falta que nunca.

-Sí, pero nosotros vamos a ir con once porque Tyler Haws no está y Jaylon Brown no va a recuperarse a tiempo. Los once van a tener un papel importante, ahora con más razón al jugar cada 48 horas. Los cuerpos no están preparados y habrá que dosificar minutos para que todos puedan rendir a un nivel óptimo.

"Estar en dos competiciones es un aliciente para que continúen algunos jugadores que queremos mantener con nosotros"

"Que se dispute la fase final es bueno, pero no vamos a ver el mejor nivel de ninguno de los doce equipos porque no están preparados"