Bilbao - Lo dijo Álex Mumbrú el viernes y no es, en absoluto, por aquello de ponerse la venda antes de sufrir la herida. El Bilbao Basket debe acostumbrarse a una nueva realidad deportiva, tiene que adaptarse a una novedosa estructura de equipo y es probable que los reajustes requieran, como él mismo dijo, "tiempo". Pero si algo no da la competición es tregua y al conjunto vizcaino le toca afrontar hoy en la cancha del Betis otra nueva y complicada prueba. Ya salió vivo de la lesión de Jaylon Brown, con triunfos de campanillas ante Valencia Basket y Unicaja y una digna derrota copera ante el Real Madrid, pero la marcha de Axel Bouteille es, en la parcela deportiva, un durísimo misil a la línea de flotación de un equipo que ha perdido a sus dos principales referentes ofensivos. A falta de lo que puedan aportar Tyler Haws y Quentin Serron, al actual Bilbao Basket le faltan 30 puntos con respecto a hace un mes y esa es una rémora que debe afectar sí o sí.

Mumbrú quiere seguir siendo lo más fiel posible a su idea de equipo y juego, pero no cabe duda de que deberá tocar resortes e incluir variaciones tácticas para no perder esa competitividad que se había convertido en santo y seña del equipo. Haws lleva ya semanas trabajando con el grupo, aunque incompleto por las ventanas FIBA, y Serron apenas suma un entrenamiento con el grupo, por lo que su versión inmediata debería ser más secundaria mientras que tendrán que ser Rafa Martínez, Tomeu Rigo, Sergio Rodríguez y Arnoldas Kulboka los que den un paso al frente en las posiciones de dos y tres, mientras que los bases y los interiores tendrán probablemente mayores responsabilidades ofensivas.

El Betis, tercero por la cola con seis victorias, poco tendrá que ver con el equipo que hincó la rodilla en Miribilla en la primera vuelta, pues se ha reforzado con el solvente y veterano pívot Jerome Jordan y, sobre todo, con un arma ofensiva de primerísimo nivel en el baloncesto europeo como es Erick Green. Con ellos, Curro Segura tiene a su disposición una rotación más solvente que ofrece muchos focos de peligro ofensivo, sobre todo desde el perímetro. Y contra ello deberá pelear el Bilbao Basket en una nueva versión y estructura que hoy salta a la palestra por primera vez.