P. Avenida62

Lointek Gernika59

PERFUMERÍAS AVENIDA: Domínguez (5), Vilaró (5), Hayes (14), Hof (0), Vitola (2) -cinco inicial-, Akhator (13), Cazorla (2), Gil (6), Loyd (6) y Samuelson (9).

LOINTEK GERNIKA: Ocete (18), Dietrick (2), Arrojo (10), Lo (8), Milic (8) -cinco inicial-, Wojta (2), Díez (0), Molina (8), Mazyonite (3) y Ariztimuño (0).

Parciales: 15-19, 33-32 (descanso), 49-43 y 62-59.

Árbitros: Attard, Tetik y Bongiorni. Sin eliminadas.

Incidencias: Buena entrada en el Pabellón Municipal de Wurzburg.

Bilbao - Europa encendió las ilusiones del Lointek Gernika y devolvió la mejor versión del equipo pese a la derrota ante el Perfumerías Avenida (62-59). Las gernikarras dejaron de lado su irregularidad de los primeros partidos y se plantaron en la cancha de uno de los grandes favoritos a ganar la Eurocup sin miedo a nada, peleando de tú a tú a su rival e igualando por muchos momentos su plano físico. El conjunto salmantino se había acostumbrado a ganar con comodidad en sus primeros encuentros de la Liga Femenina y ayer, ante un adversario de esa competición pero en un escenario diferente, se llevó un susto importante. Las salmantinas llevaron la iniciativa del encuentro y llegaron a contar con diez puntos de ventaja, pero el Gernika siempre consiguió volver al partido y se quedó a solo tres puntos de forzar la prórroga, sin tiempo suficiente para culminar la remontada.

El Gernika llegó a Salamanca con la lección aprendida. Sabedor de que la más mínima bajada de brazos era decir adiós al encuentro debido a la constancia del rival. El Perfumerías Avenida, con sobrada calidad, se las ingenió para lograr parciales a base de talento, pero las gernikarras siempre supieron responder e igualar de nuevo el encuentro. Solo le faltó un poco de continuidad cuando el viento sopló de cara para marcharse en el encuentro y dar la sorpresa de la jornada.

El conjunto vizcaino apostó por tejer un entramado defensivo casi perfecto y llevar el partido a su terreno. Intensidad, trabajo y tratar de que las estrellas del equipo rival pudieran brillar lo menos posible. En este contexto, las puntuaciones de ambos equipos bajaron, pero no así su intensidad. Cada jugada era una batalla y anotar una canasta parecía misión imposible. Los dos equipos pasaron por fases de muchos minutos sin encontrar el aro, pero sus buenas labores de retaguardia permitieron que las sangrías no fueran tan grandes. Sin nada que perder, los nervios llegaron al Perfumerías Avenida y solo su acierto en los minutos finales le permitió aguantar el impulso de un Gernika que debutó en la Eurocup sin pensar en ningún límite.

La estrategia del Gernika quedó clara desde el primer minuto. Las vizcainas no se amilanaron ante el estatus del rival y salieron con mucha intensidad. Los dos aros se cerraron y los errores primaron sobre los aciertos. El guion gernikarra empezaba a funcionar. Con Arrojo de dulce ante sus excompañeras y sobre todo con un despliegue defensivo coral de mucho mérito, el Gernika logró irse al final del primer cuarto con cuatro puntos de ventaja gracias a un triple sobre la bocina de Mazionyte (15-19).

Pero contener el potencial del Perfumerías Avenida durante cuarenta minutos es imposible. Su calidad desborda y el Gernika lo notó en el segundo cuarto. La maquinaria salmantina se puso a funcionar a toda velocidad y no necesitó demasiado para endosar a las gernikarras un parcial de 14-0. Esa fue la primera prueba de fuego para las dirigidas por Mario López. Reengancharse o decir adiós con el final demasiado lejos. Las vizcainas optaron por la primera opción y demostraron que también son capaces de contestar parciales. Una entrada de Ocete, soberbia todo el choque, puso el 31-32 y mantuvo en vilo el encuentro.

Los dos equipos intercambiaron golpes en el tercer periodo, sin que ninguno pudiera romper definitivamente el choque. Fue justo en la última jugada de este cuarto cuando despertó Samuelson. La californiana afinó la puntería desde la línea de tres puntos y fue clave en el despegue de las salmantinas (61-54 a falta de 50 segundos). Sin embargo, el Gernika ayer no encontró la palabra rendición en su diccionario y apretó hasta el último segundo. Una entrada de Ocete y un triple de Molina crearon un final de infarto inesperado (61-59) pero la bocina sonó demasiado pronto.