bilbao - Los partidos ante el Baskonia siempre suponen un aliciente extra para el Bilbao Basket. En este caso, esa motivación se aumentará debido a que es el primero que se disputa en la ACB tras el regreso de los ‘hombres de negro’ a la máxima categoría. Álex Mumbrú ya sabe lo que es jugar encuentros de este estilo, diferentes a los demás y en los que la clasificación muchas veces queda en segundo plano. El técnico catalán deberá trasmitir a sus jugadores las sensaciones que se pueden encontrar en el Bilbao Arena. Sin embargo, no lo tendrá difícil. En el ambiente ya se respiran esos aires de choque especial. Los billetes empiezan a agotarse y la tensión irá creciendo hasta que el balón suba por primera vez al aire mañana a las 17.00 horas.

El Bilbao Basket quiere aprovechar su fortaleza como local y apoyarse en su afición de cara a jugar un partido en el que se espera un ambiente espectacular. “Para nosotros jugar en Miribilla es fundamental y tenemos marcado con una equis todos los partidos que jugamos en casa. Es bonito jugar estos partidos como local y para los jugadores saber que el pabellón estará a reventar es un aliciente”, reconoció Mumbrú. La venta de entradas va en muy buen camino y la mayoría del papel está ya vendido. Los propios integrantes del equipo saben que este encuentro no será uno más. El derbi es un partido esperado y los hombres dirigidos por Mumbrú “saben lo que conlleva y están con ganas de jugar este partido”

La jornada pasada en la derrota ante el Monbus Obradoiro, el conjunto vizcaino por fin pudo sacar a la pista su rotación al completo. Tomeu Rigo y Emir Sulejmanovic por fin pudieron disputar minutos después de recuperarse de sus respectivas lesiones. Eso también se notó en los entrenamientos y Mumbrú pudo preparar el partido contra el Baskonia con todos sus efectivos: “Para nosotros era importante estar todos juntos. Están todos físicamente bien, con algún golpe típico del entreno, pero estarán todos cambiados para el partido”. El que no podrá contar con todas sus piezas será Velimir Perasovic. El Baskonia llega con la baja segura de Jayson Granger y Nik Stauskas será duda hasta última hora.

Además, al conjunto gasteiztarra se le une que jugó ayer en Moscú ante el Khimki, lo que supone un largo viaje y pocas horas entre partido y partido. Desventajas que el propio Mumbrú no cree que influyan debido a la categoría de su rival: “Está claro que puede haber algo de cansancio en ellos, pero es un equipo confeccionado para estar arriba y están acostumbrados. Con tanto físico y con un equipo de catorce jugadores, no creo que se note mucho”. El Baskonia es un equipo con muchas armas, capaz de hacer daño desde muchos frentes. “Interiormente con Fall tienen muchos centímetros. Tienen cinco pívots de nivel muy alto. Está también Shengelia, Michael Eric, al que conocemos bien; Diop? tienen buen juego interior y lo compensan con un buen juego exterior”, añadió Mumbrú.

El antecedente entre estos dos equipos es la final de la Euskal Kopa disputada en pretemporada. Mumbrú cree que la comparación entre estos dos encuentros “no es muy real”. Sin embargo, al mismo tiempo también reconoce que enfrentarse a conjuntos de Euroliga a estas alturas del curso puede resultar beneficioso: “Los equipos que están llamados a estar en la zona noble de la clasificación conforme van pasando las semanas se van haciendo más equipo. Sus objetivos no están en octubre, están en febrero o en marzo y van entrando poco a poco. Muchas veces es mejor jugar contra ellos ahora”. Mientras, el Bilbao Basket no tendrá esa excusa de mirar al futuro. Su objetivo es el ahora y sumar victorias lo más rápido posible sin pensar más allá de en la siguiente semana.