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Las mujeres que desafiaron a los hombres en el deporte

El partido entre Kyrgios y Sabalenka del 28 de diciembre recuerda a los casos más emblemáticos donde las mujeres enfrentaron el machismo que había en la sociedad

Las mujeres que desafiaron a los hombres en el deporteEP

Este 28 de diciembre tendrá lugar la segunda parte de 'La Batalla de los Sexos'. El partido que enfrentará al tenista Nick Kyrgios y la actual número uno del mundo Aryna Sabalenka, tendrá lugar en el 'Coca Cola Arena' de Dubai, y las expectativas para la cita son máximas. Un choque que ha recordado al mítico partido de tenis entre Billie Jean King y Bobby Riggs, y que recuerda a aquellos momentos en los que las mujeres intentan abrirse paso en un mundo que la sociedad presupone de hombres.

Corría el año 1973, el tenis empezaba a consolidarse como un deporte trascendente, aunque elitista a los ojos del mundo. Como la mayoría de prácticas deportivas de esa época, era un mundo dominado por los hombres. En ese contexto surgió la primera 'Batalla de los Sexos'. Bobby Riggs, un excampeón de tenis, se dedicó a insultar al tenis femenino, diciendo que era tan malo que hasta un señor de 55 años como él podría ganarles. Se autoproclamó el "chovinista número uno". Sus palabras se toparon con Billie Jean King, la número dos del 'ranking' WTA por aquel entonces.

La estadounidense respondió en la pista. Ante 30.000 espectadores en Houston y una audiencia televisiva mundial de 90 millones, la tenista lo aplastó en tres sets (6-4, 6-3, 6-3). No fue una simple victoria deportiva, fue la demostración pública de que el argumento de la supuesta "superioridad masculina" era, como diría el propio Riggs al final del partido, una subestimación, el encuentro sirvió de base para que se comenzaran a exigir salarios equitativos en torneos como el US Open.

No era la primera vez que un hombre competía contra una mujer en una pista de tenis. El 13 de mayo de 1973, coincidiendo con el Día de la Madre en Estados Unidos, Bobby Riggs se enfrentó a Margaret Court, la jugadora número uno del mundo y una de las figuras más dominantes de la época. El resultado fue un abultado 6-2 y 6-1 para Riggs. Tras esta derrota, la presión sobre Billie Jean King aumentó e hizo que finalmente aceptara el desafío para responder a las provocaciones de Riggs.

Si bien en la mayoría de deportes existe una gran diferencia de salarios dependiendo del género, el tenis cuenta con una gran equidad en este aspecto. La gran victoria de la igualdad se conquistó en los cuatro torneos 'Grand Slam' (US Open, Wimbledon, Roland Garros y Australian Open), donde, gracias al activismo de pioneras como Billie Jean King, hombres y mujeres reciben exactamente el mismo premio en metálico. No obstante, fuera de estos grandes eventos, como pueden ser los torneos 'ATP' 250, 500 o 'Masters 1000', la diferencia salarial persiste.

Mujeres ganadoras

A lo largo de la historia del deporte ha habido infinidad de casos de este tipo. En 1967, el Maratón de Boston era solo para hombres. Pero Kathrine Switzer tenía otros planes. Se inscribió como "K.V. Switzer" y, a mitad de la carrera, un oficial la reconoció y trató de sacarla a empujones gritándole que se "saliera de su carrera". Ella siguió corriendo, protegida por otros competidores. La foto del forcejeo dio la vuelta al mundo, convirtiéndose en el icono definitivo de la lucha por la inclusión femenina en el atletismo de fondo.

La mítica imagen del forcejeo entre Kathrine Switzer y operarios de la Maratón de Boston

En 1926, la joven neoyorquina Gertrude Ederle se propuso una locura para la época: ser la primera mujer en cruzar a nado el peligroso Canal de la Mancha. A sus 21 años, y tras ganar oros y bronces en los Juegos Olímpicos de París 1924, enfrentó las críticas que aseguraban que era "una hazaña imposible para una mujer". Ederle desoyó todas esas voces. Tras un intento fallido en 1925, atravesó los 34 kilómetros de agua helada en solo 14 horas y media, pulverizando el récord masculino existente por dos horas.

La "Reina de las Olas" regresó a Nueva York recibida con un desfile multitudinario, demostrando que la resistencia y la capacidad atlética no tienen género. Aunque su fama se disolvió con los años, su vida es un poderoso testimonio: incluso enfrentándose a una sordera que se agravó con los años, siguió enseñando natación a niños con discapacidad auditiva.

Una de las gestas más importantes en el mundo del deporte la consiguió una de las nuestras. Durante décadas, el alpinismo de élite se narró casi exclusivamente en clave masculina. Sin embargo, la tolosarra Edurne Pasaban desafió completamente lo establecido.

Pasaban se puso como meta conquistar los catorce ochomiles, un desafío épico que le llevó casi una década. A lo largo de su carrera, tuvo que lidiar no solo con la hipotermia, las caídas y las condiciones climáticas brutales –como la congelación que le costó varios dedos de los pies en el K2–, sino también con el escepticismo y la invisibilidad que a menudo rodeaba a las mujeres alpinistas. El reto final se convirtió en una carrera global. Tras subir el Shisha Pangma en 2010, se convirtió en la primera mujer en completar los catorce picos más altos del mundo en mayo de 2010.

Edurne Pasaban en la cima del Sisha Pangma.

La vasca no es la única mujer que escribió su nombre en la historia de esta disciplina. Junko Tabei era una apasionada de la montaña. En 1969, fundó el 'Ladies Climbing Club', el primer club de montaña solo para mujeres de su país. Seis años más tarde, en el Año Internacional de la Mujer, su equipo y ella se lanzaron a la expedición. La travesía fue brutal: sobrevivieron a una avalancha que las sepultó en el Campo II, pero Tabei fue rescatada por su guía sherpa. Solo doce días después de ese terrible incidente, el 16 de mayo de 1975, la japonesa hizo historia junto a su guía, Ang Tsering. A sus 35 años, y con una hija de tres años en casa, se convirtió en la primera mujer en coronar la cima del Everest. Este logro no solo enfrentaba el estigma machista que existía, sino que sino que puso en entredicho el requisito de una gran complexión física para el alpinismo extremo: la pionera medía tan solo 1,48 metros.

Todos estos logros hacen que el partido disputado el 28 de diciembre sea algo más que un simple 'show', en el que se pretende enfrentar a la mejor tenista del mundo contra el virtuoso y polémico Kyrgios.

Será una nueva oportunidad para demostrar la valía de las mujeres en deportes en los que se presuponía superioridad masculina hasta la fecha, turno ahora del ya tan globalizado, tenis.