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El United elimina al Liverpool en la Copa

Bruno Fernande decanta de falta el clásico del fútbol inglés y clasifica a su equipo a los octavos de final del torneo más antiguo

El United elimina al Liverpool en la CopaAfp

Manchester United 3

Liverpool 2

MANCHESTER UNITED: Henderson; Wan-Bissaka, Maguire, Lindelof, Shaw; Pogba, McTominay, Green-wood (Min. 66, Fred), Van de Beek (Min. 66, Bruno Fernandes), Rashford (Min. 86, Martial); y Cavani.

LIVERPOOL: Allison; Alexander-Arnold, Williams, Fabinho, Robertson; Thiago (Min. 81, Shaqiri), Milner, Wijnaldum (Min. 62, Mané); Salah, Firmino (Min. 81, Origi) y Jones.

Goles: 0-1: Min. 18; Salah. 1-1: Min. 26; Greenwood. 2-1: Min. 48; Rashford. 2-2: Min. 58; Salah. 3-2: Min. 78; Bruno Fernandes.

Árbitros: Craig Pawson (Inglaterra). Amonestó a Lindelof y Pogba, del Manchester United; y a Fabinho y Mané, del Liverpool.

Incidencias: Partido correspondiente a los diecisesavos de final de la FA Cup, disputado en Old Trafford a puerta cerrada.

Manchester United y Liverpool homenajearon en un partidazo de fútbol con mayúsculas a la FA Cup, la competición de fútbol más antigua del planeta. El clásico del fútbol inglés tuvo casi de todo: goles, ritmo, errores, emoción... solo faltó el público. Nada nuevo a estas alturas tras casi un año de pandemia. Los locales, en su mejor momento en muchos años, hasta el punto de que lideran la Premier, competición que no ganan desde 2014, con una interesantísima hornada de jóvenes futbolistas y un Paul Pogba que recuerda al de sus mejores años, estuvieron más atinados que sus eternos rivales para clasificarse a los octavos de final de Copa.

El Liverpool pagó demasiado caro el peaje de no tener a ningún central sano de la primera plantilla. Klopp ha tenido que hacer un encaje de bolillos ante las largas bajas de Van Dijk y Joe Gomez y, aunque Fabinho parece haberse amoldado al eje de la zaga, las prestaciones del joven Rhys Williams (cumplirá 20 años el 3 de febrero) no son las mínimas exigibles para un equipo como los reds. Pecados de juventud.

El partido arrancó con un ritmo vertiginoso, con acciones ofensivas de uno y otro equipo. Los locales buscaron peligro a la contra y el Liverpool con un fútbol más de control. Así, pasado el primer cuarto de hora, llegó el primer tanto del choque, obra de Salah. Firmino, en su primera aparición del partido, se dejó caer a la zona de la media punta para enviar un pase medido al egipcio. Midió mal Lindelof, que dejó un metro de separación con Salah, una distancia inalcanzable, y este picó con maestría ante la salida de Henderson, titular ayer en la portería del Manchester United, donde descansó De Gea.

Los diablos rojos, que ya habían asomado con peligro en la portería de Alisson gracias a la velocidad de Rashford, no necesitaron ni diez minutos para poner la igualada. El atacante inglés, el más destacado en el bando local, sirvió en largo con mucha calidad al otro extremo, el joven Greenwood, que batió de disparo potente al meta del Liverpool.

Los últimos 20 minutos de la primera mitad fueron de claro dominio del Manchester, al que le faltó acierto, especialmente en las acciones a balón parado, donde sus futbolistas se impusieron con cierta facilidad a los pupilos de Klopp.

A la vuelta de vestuarios, el técnico alemán mandó a calentar a Mané y su homólogo en el banquillo rival, Ole Gunnar Solskjær, respondió con Bruno Fernandes. Mucha dinamita en la banda. Ambos fueron testigos directos del error de Williams al intentar despejar un balón largo de Greenwood hacia Rashford que dejó solo a este último ante Alisson, que poco más pudo hacer que recoger el balón de la red. Se intercambiaron los papeles los atacantes del Manchester United nada más iniciarse la segunda mitad.

El gol sacó la mejor versión del Liverpool, que rozó el empate por medio de Milner, cuyo remate desde dentro del área no encontró portería. Algo que sí hizo Salah poco antes de la hora de juego. Recuperó el balón el conjunto red en campo rival, inició una rápida transición que acabó en las botas de Firmino y Milner, con un amago que debió contar como asistencia, dejó solo al atacante egipcio, que superó de nuevo a Henderson.

Entraron entonces al campo Mané y Bruno Fernandes con el claro objetivo de romper el empate, algo que logró el portugués tras un lanzamiento de falta desde la frontal del área que se coló por el palo de Alisson, que pudo hacer bastante más para evitar el gol. Con apenas diez minutos por delante, el Liverpool no pudo siquiera poner en apuros a un Manchester United sólido que a día de hoy es más equipo que su eterno rival.

El resto de partidos

Por lo demás, no hubo grandes sorpresas en el resto de partidos de ayer de los diecisesavos de final de la FA Cup. El Chelsea, con Kepa Arrizabalaga como titular, quien cometió un grosero error, venció 3-1 al Luton; el Leicester ganó 1-3 al Brentford y el Burnley 0-3 al Fulham.