Duración: 48:13 minutos de juego.
Saques: 3 de Rezusta (tantos 4, 6 y 8) y 4 de Artola (tantos 4, 12, 14 y 19).
Faltas de saque: Ninguna.
Pelotazos: 222 pelotazos en juego.
Tantos en juego: 10 de Rezusta y 6 de Artola.
Errores: 12 de Rezusta y 4 de Artola
Marcador: 0-1, 1-1, 1-2, 2-5, 4-6, 4-7, 5-7, 8-8, 9-12, 9-13, 1’-14, 14-15, 15-17, 15-18, 16-19, 17-20 y 17-22.
Botilleros: Ejercieron de botilleros Mikel Gallastegi (con Beñat Rezusta) y Mikel Artola (con su hermano, Iñaki).
Apuestas: Se cantaron de salida posturas de 100 a 80 a favor de Artola
Incidencias: Partido correspondiente a los octavos de final del Manomanista de Primera disputado en el Frontón Municipal de Bergara. Lleno.
Bilbao - Le pudo la ansiedad a Beñat Rezusta en su primer partido en el presente Manomanista de Primera. Comenzar ante los suyos le hizo salir agarrotado, sin ese toque violento con el que acostumbra a jugar y cometió demasiados errores para poder sacar el partido de los octavos adelante. A su rival, Iñaki Artola, tampoco le fueron mejor las cosas. El pelotari de Alegia no pudo hacer daño con su aire y apenas cruzó la pelota, aun así, supo sufrir más, aguantó los malos momentos y fue recolectando puntos de aquí y allá para ir acercándose al 22. Como una hormiguita fue haciendo pequeñas tacadas y eso le valió para sobrevivir ante la irregularidad del bergararra, capaz de alternar remates propios de los mejores delanteros como de cometer errores en las pelotas más sencillas. Así, lejos de su mejor nivel y con una versión más efectiva que efectista, Artola consiguió el pase a los cuartos de final gracias a su victoria por 17-22. Ahora, en la siguiente ronda, el delantero guipuzcoano deberá dar un paso más ya que en frente tendrá a uno de los favoritos a hacerse con la txapela, Oinatz Bengoetxea.
Trabajó a destajo Artola en la primera fase del partido. El de Asegarce vivió a merced de Rezusta en los primeros compases, para lo bueno y lo malo, y no tuvo opción de ser protagonista. El zaguero de Bergara lo quiso todo para él en el inicio. Sin querer esperar al siguiente pelotazo, Beñat buscó acabar a las primeras de cambio y se metió en un lío él solo. Aprovechando los errores, el alegitarra logró una pequeña ventaja de cuatro tantos y empezó a sentar las bases para la victoria. Aun así, con el marcador de su lado, Artola no estuvo cómodo. Su dedo lesionado durante el Parejas le causó molestias y para más inri, un par de pelotas le entraron en la mano. No era su día. Mientras, Rezusta, cabezón, siguió con la misma táctica, buscando acabar rápido los tantos, aunque sin alargar los golpeos. El brazo estuvo agarrotado y solamente el disparo inicial permitió al pelotari local poder mantenerse vivo en el encuentro.
Sin poder usar su juego habitual, Rezusta cambió el chip y empezó a moverse más como un delantero estilista que como un zaguero pegador. Buscó el aire, siguió castigando con el saque y dejó varios tantos llenos de belleza gracias al dos paredes, su firma personal, un golpeo natural para él y en el que se aprovecha de su condición de zurdo para hacerlo demoledor, indefendible. Artola no consiguió conectar con el partido en esta fase debido a la irrupción de Rezusta en los cuadros alegres y sin su habitual facilidad para el remate, permitió que el marcador se igualara hasta los catorce tantos.
De racha en racha. Así fue el partido. Así fue el juego de los pelotaris. Una montaña rusa en la que se movió sobre todo Rezusta y que Artola nunca supo gobernar. Pero entre tanto error, era día para un pelotari sobrio, seguro en el caos. El alegitarra fue el que menos falló durante todo el choque y en la fase final el zaguero de Bergara cometió otra tacada de errores que hicieron que Artola despegara. Con una pequeña ventaja y el depósito de gasolina en la reserva, el guipuzcoano supo mantener la calma y pudo cerrar el partido valiéndose de los errores de su oponente.