bilbao. Garbiñe Muguruza ya ha llegado. La tenista vasca nacida en Venezuela logró ayer en Hobart su primer título en el circuito de la WTA. En su segunda aparición tras seis meses fuera de las pistas por una grave lesión en el tobillo y tras pasar por la fase previa, la discípula de Alejo Mancisidor liquidó con un contundente 6-4 y 6-0 y solo 70 minutos de esfuerzo a la checa Klara Zakopalova para cerrar el torneo sin ceder ni un set. "No esperaba ganar tantos partidos en mi segundo torneo del año, pero sabía que había trabajado duro", comentó Muguruza, que se colará justo antes del Abierto de Australia entre las 50 mejores del mundo.

La tenista nacida en Caracas y afincada en Barcelona está a los 20 años en el punto justo para dar el salto porque, además, su juego de ataque constante con la derecha y con el revés y su buen servicio le deberían hacer progresar en un circuito muy igualado y en el que ya no existen las resistentes jugadoras de antaño.

El Abierto de Australia contará, así, con un doble presencia vasca. Garbiñe Muguruza tendrá un complicado debut ante la estonia Kaia Kanepi, 24ª cabeza de serie. Por la parte alta del cuadro está la tolosarra Lara Arruabarrena, 101 del mundo, que jugará en su estreno ante la serbia Vesna Dolonc. Si gana, el premio será enfrentarse en segunda ronda a Serena Williams, que busca su sexto título en el Abierto de Australia y su 18º Grand Slam. Palabras mayores porque eso le igualaría en el palmarés histórico con Martina Navratilova y Chris Evert. La de Florida, que acumula 22 victorias consecutivas, y Viktoria Azarenka, ganadora en Melbourne en 2012 y 2013, son las grandes favoritas de nuevo. De hecho, la bielorrusa fue la última jugadora que ganó a Serena el 19 de agosto de 2013.