Bilbao. El intenso culebrón que han mantenido durante el último mes y medio el Bilbao Basket y Gescrap llegó ayer, finalmente, a su fin. Desde que el pasado 12 de octubre saltara a la palestra la disparidad de criterios entre ambas partes en lo referente a la duración de su contrato de patrocinio -la empresa consideraba que era de un solo año y que, por lo tanto, ya había caducado, mientras que el club aseguraba que tenía vigencia hasta 2015 tal y como se escenificó en el acto de presentación- el cruce de acusaciones entre ambas partes ha sido áspero, pero finalmente las conversaciones han llegado a buen puerto y se ha conseguido evitar una resolución judicial que parecía asegurada debido a lo diametralmente opuestas que eran ambas posturas. Finalmente, club y empresa firmaron ayer el acuerdo de desvinculación tras una larga reunión matinal, abonando Gescrap mediante un talón bancario 750.000 euros, montante que supone el 50% de la cantidad recibida por el club el pasado curso y del que esperaba ingresar también tanto el presente ejercicio como en los dos siguientes.
Gracias a esta inyección económica, el Bilbao Basket consigue recuperar la liquidez necesaria para poder afrontar los primeros pagos a su plantilla, que aceptó variar el sistema de cobro -en lugar de mensualidades cobrarán durante este curso un sueldo y una ficha en dos partes de la temporada- por los problemas de tesorería del club, agravados aún más cuando la Diputación Foral de Bizkaia anunció hace quince días su decisión de dejar de ayudar económicamente al deporte profesional como consecuencia de la crisis, dejando al Bilbao Basket sin otros 1,9 millones de euros. Así las cosas, esos 750.000 euros ayudarán a cuadrar las cuentas del club, pero el montante está muy lejos de las aspiraciones iniciales del club. Y es que Gorka Arrinda, máximo accionista de la entidad, no descartó el día que salió a la palestra para explicar su postura que la polémica tuviera que resolverse en los tribunales "y de ahí podemos salir con un acuerdo de 4,5 millones de euros".
Pero, finalmente, ambas partes han decidido evitar la vía judicial por el desgaste que hubiese supuesto y por la dilatación en el tiempo que hubiera sufrido el proceso antes de que cristalizara en una sentencia firme. El acuerdo firmado ayer se trasladó a la opinión pública en un comunicado tan escueto como políticamente correcto. En él se destaca que el consenso ha llegado "después de que ambas partes mostrarán una clara voluntad por concluir de la mejor manera posible. Desde el Bilbao Basket queremos agradecer el apoyo mostrado por Gescrap durante este tiempo y le deseamos desde este momento toda la suerte en sus retos empresariales. Desde Gescrap se desea al club el éxito en sus desafíos deportivos que permita la mayor satisfacción a sus seguidores". Así las cosas, Gescrap desaparece de inmediato de la denominación oficial del equipo, que pasa a ser Bilbao Basket, y desde el club se trabaja desde ayer para que su logotipo y denominación ya no aparezca ni en la equipación oficial del equipo ni en los soportes publicitarios del Bilbao Arena en el encuentro que mañana disputarán los hombres de negro ante el Assignia Manresa.
Nuevo patrocinador a la vista Además del final del culebrón con la empresa sestaoarra, la masa social del Bilbao Basket podría recibir en las próximas semanas otra grata y tranquilizadora noticia desde el punto de vista económico, ya que, según ha podido saber este diario, el club tiene muy avanzadas negociaciones con una nueva firma que recogería el testigo de Gescrap como patrocinador nominal del equipo y permitiría al conjunto vizcaino mantener un nivel competitivo elevado. Se trataría de un grupo industrial vizcaino muy interesado en utilizar el baloncesto, y a los hombres de negro en particular, para dar a conocer una de sus marcas. Pese a que todavía no hay absolutamente nada firmado, ambas partes han mantenido numerosos contactos y conversaciones a lo largo de las últimas semanas y varios responsables de la empresa presenciaron en vivo y en directo el duelo de Eurocup del miércoles ante el Lukoil Academic, quedando más que satisfechos del ambiente del Bilbao Arena. La intención de ambas partes es que el acuerdo de patrocinio sea de larga duración, preferiblemente de cuatro años, y que entre en vigor a finales de diciembre o en enero.
Si estas conversaciones acaban cristalizando en un acuerdo firmado, el horizonte económico del Bilbao Basket aparecería tan despejado y optimista como su presente momento deportivo. Invictos y clasificados para el Last 16 en la Eurocup y con un balance de 7-2 en la Liga ACB, los hombres de negro no se han visto en absoluto afectados por los problemas de liquidez de un club que empieza a ver la luz al final del túnel en lo que respecta al apartado económico.