MADRID. La Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) considera una "práctica anti-huelga" y se opone a la solicitud de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), de reasignar la primera jornada de Liga en Primera y Segunda División.

Según señala AFE en un comunicado, tras conversaciones con la RFEF, tiene constancia de que los árbitros designados para la primera jornada del campeonato liguero de Primera y Segunda, no tienen que acudir al lugar de los encuentros programados.

En esta situación y con independencia de que la AFE considera que "las decisiones impulsadas desde la LFP constituyen prácticas contrarias al derecho de huelga y a la libertad sindical", entienden que los partidos, resultan "claramente irrealizables".

"Como consecuencia de las decisiones de la LFP, cualquier actuación de los clubes dirigida a recabar de los jugadores su conformidad o no, a la convocatoria de los partidos programados, resulta una manipulación carente de sentido", sentencia.

SIGUEN SIN ACUERDO

Así las cosas, la Liga de Fútbol Profesional y la Asociación de FutbolistasEspañoles no han alcanzado un acuerdo para desconvocar la huelgade futbolistas, tras casi cuatro horas de reunión en la sede de la Liga.

Luis Rubiales, presidente de la AFE, y José Luis Astiazaran, presidente de la Liga, han defendido las posturas de cada institución en la segunda reunión después de que el pasado día 11 de agosto la AFE anunciara la convocatoria de una huelga para las dos primeras jornadas de liga.

Al término del encuentro, han comparecido Astiazarán, por parte de la Liga, y Luis Gil, como gerente de la AFE, para anunciar que sigue sin existir acuerdo entre las partes aunque han reconocido la existencia de propuestas para solucionar el conflicto.

El objetivo de este segundo encuentro de negociaciones entre ambas partes era acercar posturas tras no llegarse a ningún acuerdo el pasado miércoles 17, cuando tanto la Liga como la AFE reconocieron grandes diferecias en sus planteamientos.

Las principales desavenencias entre las dos instituciones radican en el actual convenio colectivo, el cual según la AFE no aporta suficientes garantías de cobro para los jugadores.

El sindicato de futbolistas exige la elaboración de un nuevo convenio en el que prime la Ley del Deporte por encima de la Ley Concursal, legislación mercantil a la que pueden acogerse actualmente los clubes y que permite no hacer frente a las deudas acumuladas y congela el pago de las nóminas de los jugadores.