Los recuerdos en forma de imagen, en una página arrugada de periódico o en una foto que va perdiendo el color permanecen tangibles y perennes con el caer de las hojas del calendario. "Yo salí en DEIA en una foto en primer plano y llamé para que me la mandaran". Pero los recuerdos que alberga el baúl de la memoria son aún más imborrables, por especiales y únicos algunos fotogramas de la vida se guardan, sin llave para el olvido, para la eternidad. "Esto… esto se queda en mente para siempre seguro". Resulta que unos chicos de un equipo de Tercera División, la clase obrera del fútbol, la del barro y los campos de pueblo, se enfrentaron dos veces a un club de Primera, el del fútbol estelar, el del lujo y la exclusividad. El Portugalete se mide esta noche (21.00 horas) al Getafe en los dieciseisavos de final de la Copa; sólo dos años antes, el 29 de octubre de 2008, ese mismo club jugó contra el Valencia en la misma ronda del torneo del K.O. Alberto Pérez, Ander Vidal, Imanol Aguiar, Urko Macías y Eriz Goiria son los jugadores de la actual plantilla jarrillera que disfrutaron del partido ante el conjunto ché y que ahora podrán repetir esa experiencia que se antojaba tan irrepetible, tan platónica, tan utópica frente a los pupilos de Míchel. "Ni en los mejores sueños entra lo que estamos viviendo".
Entre el ritmo frenético que estresaba a La Florida ayer: gente para arriba y para abajo cargando con miles de cosas, las grúas montando las torres de iluminación, reuniones para controlar hasta el último detalle… los futbolistas se preparaban, mientras la música retumbaba en los vestuarios, para su último entrenamiento antes de enfrentarse al Getafe -con la habitual charla técnica incluida-. Los cinco privilegiados evocaban poco antes de ponerse a correr la anterior eliminatoria copera ante el equipo de Mestalla. "Una anécdota", escapa de la boca del portero Urko Macías: "De cuando salimos al campo: pasa el Valencia, nos saluda. Pasamos nosotros donde el árbitro, le saludamos y Ander, que era el capitán, hace el amago y dice: ¿Tenemos que volver a pasar por donde el Valencia? Y Marchena y algún otro descojonándose". La risa estalló también ayer entre los futbolistas aurinegros al recordarlo. "Es que ese momento… Tú cuando sales al campo estás a lo tuyo, pero cuando les saludas y te das la mano con Morientes, Helguera…", continúa Alberto.
Y llegó después el pitido inicial. El arranque a noventa minutos en los que el Portu iba a estar en la élite, en los que los focos alumbrarían a los jugadores que trabajan en la penumbra del fútbol no profesional. "Piensas que prácticamente seguro te van a ganar, albergas alguna esperanza, pero al minuto cinco ya ves que es imposible. Ves enseguida la diferencia y que ellos son de Primera y nosotros de Tercera, pero aun así, estás con la pequeña ilusión de dar guerra", desgrana Vidal. El equipo entonces entrenado por Javier Bermúdez cayó ante el conjunto de la capital del Turia por 1-4. Urko Vera firmó la diana portugaluja en Lasesarre. Y es que el aforo de La Florida, de poco más de 5.000 personas, no daba para engullir a todos los aficionados deseosos de ver el histórico encuentro y hubo que recurrir al vecino campo baracaldés. "Fuimos todos en autobús para allí", apunta Alberto. "También íbamos con la música puesta", agrega. "Sí, tenemos al Sergio Ramos del equipo. Imanol es el de la música", desvela Urko Macías. "Que va, yo sólo soy el de la canción de la suerte. Una que puse y nos fue bien", aclara entre risas Aguiar. Y así, con la ilusión que genera una cita de tales dimensiones, iban masticando los jugadores del cuadro jarrillero sus pedazos de gloria. Únicos. Pero el momento es hiperbólico porque son los familiares, los amigos, los conocidos o los vecinos del pueblo sin más los que alucinan. "Más que nada es la gente que te rodea la que te dice: ¡Os ha tocado un Primera!", señala Aguiar. "Sí, al final es más lo que te preguntan o lo que te dicen que lo que tú sientes", comparte Alberto.
intercambio de camisetas Las camisetas son otras de las reliquias que agitan el recuerdo, se conservan junto a los periódicos añejos y las fotos desteñidas. Las camisetas son la prueba de una conquista. En el compromiso copero contra los de Unai Emery, casi todos los jugadores del Portu pidieron la elástica a sus adversarios. "Tengo la de Morientes, la tengo bien guardada con mucha ilusión", comenta Vidal, que además explica que "se la pedí antes del partido y muy majo me la dio cuando terminó. Y él me preguntó que si le daba yo la mía y yo sorprendido le contesté: ¿Que quieres una camiseta del Portu? Y me dijo que sí, que las coleccionaba". "Yo tengo la de Edú y la de Hugo Viana. Pero la mía no la di porque la quería de recuerdo para mí", afirma Alberto entre carcajadas. Urko Macías se quedó con la de Asier del Horno y la del guardameta Guaita. Aguiar, con la de Helguera y Goiria, con la de Angulo. Estos dos últimos jugadores aurinegros -además de Alberto que participó en ambos encuentros- disputaron el duelo de vuelta en Mestalla, donde los valencianistas ganaron por 3-0. "El vestuario nos impactó bastante porque era impresionante. Y luego en el campo estuvimos haciendo unas fotos para quitarnos el miedo escénico", asegura Eriz.
Todos los recuerdos, tan recientes, sin estar apenas guardados en el cajón, revolotean de nuevo ahora ante el choque contra el Getafe. "Va a ser distinto. Por el rival, que vale que es un equipo de Primera y que juega en la Liga Europa, pero no es igual, y por jugar en La Florida, que ya simplemente por las medidas del campo, es distinto. Vamos a intentar ponérselo difícil, ilusión no nos va a faltar", proclama el meta del equipo portugalujo. "Yo tengo 31 años y no creo que me queden muchos partidos bonitos por jugar. Lo quiero aprovechar y pasarlo bien", admite Vidal. "Tiene que ser una fiesta para disfrutar", resume Alberto el sentir de la plantilla.