bilbao. Resuenan los tambores de guerra, silban las balas y doblan las campanas en Gasteiz. El Ogueta, refugio de grandes duelos, acogerá, a partir de las 23.15 horas de hoy, el inicio de la Feria de La Blanca. El pistoletazo de salida lo dará Juan Martínez de Irujo, junto a Rubén Beloki, frente al dúo vizcaino del torneo gasteiztarra: Pablo Berasaluze, ducho en labores veraniegas, y Alexis Apraiz, zaguero en progresión.
"Será un partido difícil ante una pareja complicada. Los dos tienen mucho nombre y muchos títulos", señala el fornido gernikarra. No en vano, la pareja colorada suma ocho txapelas manomanistas -cuatro por barba-, cinco entorchados del Parejas -tres el de Ibero y dos el de Burlata- y uno, del delantero, del Cuatro y Medio, lo que hace del dúo un tándem temible por su alcurnia. "Intentaremos sacar nuestro juego. Está claro que son dos pelotaris muy buenos, pero trataré de dominar a Rubén en la zaga, para ayudar a Pablo en los cuadros alegres", admite Apraiz, quien declara que el berriztarra "debe terminar los tantos ante un delantero que anda muy bien. Irujo está a un nivel muy alto y Beloki es todavía una incógnita, ya que viene de una lesión".
"Con Berasaluze VIII ya llevo varios duelos y juego muy a gusto. Fuera de los frontones somos amigos y nos llevamos muy bien. Así es más fácil afrontar los partidos. Con la experiencia que Pablo tiene, si me tiene que echar la bronca, me la echa, y no ocurre nada. No hay enfados", sostiene el zaguero gernikarra. Analiza la simbiosis que existe entre los dos manistas vizcainos, cincelada entre la amistad y la confianza, premisas que, frente a contendientes tan complicados, deben ser el pilar de los azules. Además de la solidaridad de esfuerzos y la economía laboral, la del berriztarra como arquitecto y la del gernikarra como capataz. "Pablo siempre ayuda a todos los zagueros. Intenta poner bien el cuero para el golpeo del zaguero y, si hace falta, entra de aire para quitar pelota en los momentos complicados del duelo", afirma Apraiz, quien dice sentirse "muy bien físicamente". "En San Fermín no estuve a tope, pero llevo un par de semanas en las que no he competido. He dosificado fuerzas. En invierno entrenamos muy fuerte porque jugamos una vez a la semana, pero ahora tenemos que controlar porque hay gran cantidad de partidos", remacha Alexis.
Una feria atractiva "Es una feria muy atractiva, para el espectador es muy buena, pero para jugarla.... Si ganamos, los siguientes son Xala-Barriola, que serán muy difíciles. Además, están Zubieta, Begino... Aun así, cada uno mostraremos nuestras armas", analiza Apraiz, quien se muestra muy "contento" por estar entre los mejores. "Este año, Asegarce ha confiado mucho en mí y me han asegurado que estaré también en Zarautz", remata. Le ha costado al gernikarra alcanzar la élite, pero ya no se quiere despegar de ella, del ambiente de los estelares -"lo más duro es el primer año, que te cuesta"- y de las ferias, donde silban las balas.