bilbao. Treinta y cuatro segundos. Ese es el tiempo que necesita el sistema Begira, el ojo de halcón de los frontones, para decidir si el bote de una pelota dudosa es bueno o malo y que esa imagen real captada por una cámara de alta velocidad, convertida después en un virtual mediante un programa informático desarrollado por la empresa eibarresa G-93, sea difundida por Euskal Telebista. "Desde mi punto de vista es una herramienta muy válida para los jueces porque les facilitará la labor y resolverá las dudas que pueda haber. Además, no hay dudas, de que enriquece el producto televisivo, lo hace más atractivo", considera Fernando Lopetegi, productor de ETB y con una amplia experiencia en las retransmisiones deportivas. En G-93 continúan trabajando con el objetivo de minimizar el tiempo de respuesta del Begira y optimizar al máximo su uso para reducir los costes y hacer del sistema un elemento decisivo para el arbitraje.

De hecho, tras dos pruebas exitosas del Begira, la primera el pasado día 15 en el festival de Deba (el sistema detectó un error de apreciación de los jueces que no trascendió) y la segunda el domingo en Bergara, el ojo de halcón de los frontones estará presente en la final del Manomanista, pero por el momento únicamente como un elemento gráfico más para potenciar la emisión del partido y no como sistema decisorio, puesto que la Liga de Empresas ha desestimado su uso como método de arbitraje, como ayuda para los jueces. "Todavía está en fase de pruebas y no tenemos la intención de utilizarlo de manera oficial por el momento", apuntan fuentes de la Liga de Empresas, que no han mantenido contacto con G-93, la empresa que ha desarrollado el producto junto a Vicomtech, para concretar su uso como método de decisorio.

Explican las fuentes de la Liga de Empresas, ente que organiza las principales competiciones manistas, que "el sistema está aún por pulir. Todavía existe algo de retardo entre la captación de las imágenes y el momento en que el ordenador resuelve si el bote de la pelota es bueno o malo. Creemos que las dudas deben resolverse más rápido para que sea efectivo, aunque está claro que de cara al espectador, incluso con el retraso actual, es algo novedoso y que contribuye al espectáculo".

Un menor retardo Las empresas reclaman algo próximo a la inmediatez, tal y como sucede con el sistema empleado en el tenis, para poder implantarlo de manera oficial, algo que Fernando Lopetegi, productor de Euskal Telebista e ideólogo en su día de pintar los frontones de verde cuando todos eran blancos para mejorar la retransmisión de los partidos, no cree fundamental "porque lo importante es ayudar a los jueces y aclarar las posibles dudas que surjan. Además, sinceramente, creo que los aficionados serán capaces de esperar 34 segundos a que el sistema decida", concluye Lopetegi.