Unos días antes de la gesta deportiva del pasado jueves en San Mamés, el director Pablo Berger, como buen bilbaino, se aventuraba a proponer algunas analogías con el Athletic. “Hay que salir siempre a ganar”, apuntaba el cineasta, con una actitud propia de un triunfador, sin poder adivinar que tanto el club rojiblanco como él, a través de su película, iban a finalizar la semana ganando. Mientras el equipo de fútbol se ha aproximado a una eventual final de la Copa del Rey venciendo al Barça, la película Robot Dreams ha obtenido tres premios Feroz. Y aunque esta no sería una condición sine qua non de cara a los Oscar, el partido más importante en el horizonte de Berger, es indiscutible que aporta aún más confianza al cineasta.

“Ha sido maravilloso recibir los tres premios, fue una noche inolvidable”, confesaba ayer, en conversación telefónica, horas después de alzarse con las tres estatuillas a las que optaba en los premios otorgados por la Asociación de Informadores Cinematográficos. Entre los premios conseguidos destaca el de mejor película de comedia. “En esta categoría nos premian a todos, a mí, a los productores y a las 500 personas que han trabajado en la película. Nos fuimos todos a casa muy felices”, expuso.

Pero además se trata de un galardón especial para Berger, ya que la suya es una película de animación. “Habitualmente hay una categoría para el cine de animación pero prefiero que no se diferencie, como en los Premios Feroz. La animación no es un género, los géneros son la comedia o el drama. En la categoría de mejor película de comedia éramos la única cinta de animación y me hizo mucha ilusión”, reivindicó.

Robot dreams, una tragicomedia donde la risa y el llanto se entremezclan, ha recibido, además, el premio al cartel de José Luis Ágreda. “Es el responsable de la dirección artística y ha trabajado conmigo desde el comienzo, desde hace ya cuatro años. Ha creado un Nueva York inolvidable y unos personajes increíbles. El cartel es la guinda antes de su estreno”, consideró el director. El otro apartado donde la cinta estaba nominada era mejor música original, galardón que fue a parar a Alfonso de Villalonga con el que Pablo Berger ha trabajado hasta en tres ocasiones. “En una película sin diálogos la música es la voz de los personajes”, consideró el director que alcanzó la fama con Blancanieves, una película en blanco y negro, muda, que obtuvo 10 premio Goya en 2013.

Carrera a los Oscar

La película, basada en el cómic del mismo nombre de Sara Varnon, cuenta también con cuatro nominaciones en los Premios de la Academia que se celebrarán en dos semanas: mejor película de animación, mejor guion adaptado, mejor música original y mejor montaje. “Ahora estamos en la temporada de premios. La culminación será los Goya, es como una montaña rusa con diferentes paradas. Siempre es ilusionante que te otorguen premios”, afirmó el director bilbaino. Sin embargo, la gran cruzada de su largometraje, que trata de la inseparable amistad entre un perro y un robot en el Manhattan de los años 80, será el 10 de marzo en el Teatro Dolby.

La noticia esta semana de que Robot Dreams está nominada a los Oscar ha sido como “una bomba”. A pesar de que la cinta triunfara en los Premios Annie, los más importantes del cine de animación, no fue nominada ni en los Globos de Oro ni en los Critic Choice Awards, por lo que su nominación, en cierta manera, no podía darse por hecho. “Hemos vivido los días posteriores como en una nube. Ahora es cuando lo estamos asimilando”, revelaba ayer Berger, quien indicó que es ahora cuando empieza el trabajo. El cineasta se refiere a la campaña que realizará in situ, por los circuitos estadounidenses, con los productores. “Estamos en comunicación con los distribuidores americanos Neon y viajaremos a Estados Unidos nada más acabar los Goya”, expuso.

En cualquier caso, más allá de los premios, lo que verdaderamente motiva a Pablo Berger es que el largometraje, que muestra una visión amable de la robótica, cuente con más espectadores. “Nos ilusiona mucho que gente que no haya oído hablar de la película vaya a verla. Los premios son eventos promocionales. Para mí el mayor premio es que el público vaya a ver Robot Dreams al cine”, concluyó.