El Palacio Euskalduna ha abierto hoy sus puertas de par en par para invitar a toda la ciudadanía a disfrutar de sus instalaciones así como de una variada programación cultural que, de forma ininterrumpida, se celebra desde las once de la mañana hasta las once de la noche.
La segunda edición de Bizi Euskalduna 2023 encadena durante doce horas actividades de circo, visitas teatralizadas, conciertos, cuentacuentos, coloquios… Todo ello para todas las edades.
Los más madrugadores han sido los más peques. A las once y media de la mañana, la jornada comenzaba con los ritmos y melodías elaborados por Musika Sehaskatik, un concierto interactivo para niños y niñas de entre 0 y 3 años. Una triki, bongos, guitarra eléctrica, piano y un txistu han hecho subir al escenario a más de una treintena de peques. Desde allí han jugado, improvisado con los instrumentos y bailado, algunos todavía en los brazos de sus amas y aitas.
Maialen, de dos años, ha venido con su aita Igor. “Venimos para que se relacione con la música. Al principio le ha dado un poco de miedo pero luego se ha encontrado a un amiguito y jugaba más”, contaba él, que también afirmaba ser algo “vergonzoso” a la hora de participar.
Mari Tere e Iñaki, amama y aitite, han venido con Ainize, de un añito y medio:”Creemos que también se lo ha pasado bien, pero hoy está un poco malita y no ha podido estar disfrutando tanto”.
“Hemos venido con Xabier, que tiene tres años, para que tuviera la oportunidad de interactuar con instrumentos musicales adaptados para niños pequeños. Es la primera vez que entra en contacto con la música de esta forma”, decía su ama Ane. “Yo creo que les puede venir muy bien, porque a fin de cuentas, es una actividad muy bonita… Jugar con los ritmos e ir de rápido a lento les ayuda a relajarse. Cuando ha empezado estaban todos muy tímidos, pero luego ya se han revolucionado”.
En todo esto, algo tienen que ver los ritmos, melodías y voces elaborados por Edurne Urutxurtu, profesora de lenguaje musical y piano en Bilbao música y responsable del proyecto Musika Sehaskatik; y, Malen Zobaran, profesora de música en Gernika Kalapitaka. Así como los compositores y profesores, Iván Allúe (‘Txistuman’) y Santi Basauri.
“Se trata de hacer una serie de contrastes con la música y sobre todo hacer participar a los padres que a fin de cuentas son el vehículo para llegar hasta los peques”, explicaba Edurne sobre el concierto. Esta intérprete y profesora afirma que actualmente se están perdiendo costumbres como que la familia cante a los peques o jugar con las rimas.
“Si te fijas cuando estamos actuando, los pequeños están con unos ojos mil veces más abiertos que un adulto y con toda la atención puesta aquí”, subrayaba.
OTRAS ACTIVIDADES
El hall de la primera planta ha adoptado la forma de una carpa de circo. Colas para colgarse y jugar con las telas, mantener el equilibrio sobre grandes bolas o hacer girar el aro han sido también objetivos de los más pequeños.
“Tenemos txokos diferentes. El txikitxoko es para los menores de cinco años con todos los elementos del circo adaptados a su edad; la zona de malabares y aéreos; el área de equilibrios… “, detallaba Keko, coordinador pedagógico de Txitatoki Urdaibai Zirko Eskola.
Aquí, además, se ha vivido el arte y la cultura sin barreras. Ejemplo de ellos ha sido la obra A solas con Rakel R.R, un espectáculo que enlaza la lengua de signos con danza, música y poesía al calor de las historias de su creadora e intérprete Rakel Arymux.
A las ocho y media de la tarde, en el auditorium, se mostrará el ballet Agate Deuna, un proyecto de Mikel del Valle con txalaparta, soprano, ballet, pianista y bertsolari . Este espectáculo, celebrado en la víspera de Santa Águeda será un homenaje a todas aquellas mujeres que sufren o han luchado contra el cáncer de mama.
La función continúa con Geraldine Ramírez, vocalista de jazz, que pone voz a varias canciones de su repertorio, entre otras sorpresas. Por último, se sube al escenario Peio Reparaz, cantante de Zetak.
