Redefinir, por Nerea Lupardo

EN la imagen que guardo de aquel domingo de 1997 aparece una pareja de japoneses haciendo cola ante el edificio imponente. Bilbao, Bizkaia, Euskadi entraron desde aquel día en la categoría de must cultural y turístico mundial gracias a una discutidísima, valiente y, a la postre, acertada decisión institucional que años después se revela como un cambio fundamental para la transformación de un Bilbao industrial a una ciudad de servicios, apuestas empresariales y culturales.

El Guggenheim vino a impactar, redefinir y reconvertirlo todo. Este otro buque varado en la ría se suma a un plan de ciudad que hunde ya largas raíces en el tejido social y en la conciencia ciudadana. El proyecto regenerador, de progreso continúa hacia Zorrotzaurre, va a sumergirse en Sestao para volver a salir a la luz en Getxo. Estoy deseando sumar el sello Urdaibai al carné de amiga del museo. Sigamos siempre el legado de los astilleros mirando hacia el futuro…