- La visión del colonialismo, el ecologismo o la mitología en diálogo con el océano Atlántico de la artista estadounidense Ellen Gallagher llega al centro Botín de Santander con la exposición A law... a blueprint... a scale. La muestra, que se podrá visitar hasta el 11 de septiembre, hace un repaso a dos décadas de la artista, de 56 años y que no ha podido acudir a la presentación por encontrarse “agotada” después de completar la instalación.

Lo hace a través de tres espacios y tres instalaciones fílmicas realizadas en colaboración con Edgar Clejine, en las que analiza su visión del impacto ecológico y racial de las grandes construcciones, la mitología marina y la extracción de recursos naturales en la época colonial.

Según ha explicado la comisaria de la exposición, Bárbara Rodríguez, Gallagher quedó “fascinada” por la localización del Centro Botín, junto a la Bahía de Santander, y ese fue un factor “importante” para que la artista eligiese ese espacio, por su “conexión con el agua”.

En la primera parte de la exposición, el espectador se encuentra Highway Gothic, una instalación fílmica que hace una reflexión crítica sobre la construcción dela autopista Interstate 10, que atraviesa el delta del Misisipi bordeando Nueva Orleans.

Gallagher y Cleijne denuncian la “devastación” que se produjo de un gran humedal para la construcción de la infraestructura, con su impacto ecológico en los crustáceos de la zona y el posterior desplazamiento de la población, en su mayoría de raza latina y negra. Todo ello compuesto de proyecciones en 16 milímetros y cianotipos impresos en tela sobre película de 70 milímetros, mientras de fondo suena una canción de rock experimental de la banda finlandesa Circle.

El segundo espacio que traslada Gallagher se centra en los mitos leyendas y profundidades marinas, en una serie de obras “pictóricas y a la vez escultóricas” de figuras asexuadas con tentáculos.

Esta instalación se refiere a Drexciya, un mundo mítico submarino inspirado en el dúo musical de Detroit que lleva el mismo nombre, y que dibuja un universo en el que habitan los descendientes de los esclavos que se tiraron de los barcos en su ruta entre África y Estados Unidos, ha explicado a los periodistas la comisaria de la exposición.

En un tercer espacio, el Centro Botín muestra las pinturas negras de Gallagher, una secuencia monocromática iniciada en 1998 que la artista formó con gomas de plástico y cubrió con esmalte.

En ellas, la artista norteamericana denuncia la extracción de recursos naturales como el petróleo por parte de los países colonialistas.

Además, también se expone Better Dimension, un espacio de visionado con música del jazzista Sun Ra que proyecta diapositivas con una cabeza de John F. Kennedy girando sobre un LP de vinilo. En esta última sala también se expone un cráneo de ballena fosilizado que el Museo Marítimo del Cantábrico.