La ampliación del Museo de Bellas Artes de Bilbao acaba de dar otro paso más. El presidente de BBK, Xabier Sagredo, y el alcalde de Bilbao y presidente del Patronato de la Fundación Museo de Bellas Artes de Bilbao, Juan Mari Aburto firmaron ayer el convenio entre BBK y el museo que renueva el histórico compromiso de colaboración entre ambas instituciones y aspira a reforzar su liderazgo cultural.

Este nuevo acuerdo, en el que estuvieron también presentes el consejero de Cultura y Política Lingüística, Bingen Zupiria y el director del Bellas Artes, Miguel Zugaza, establece las líneas estratégicas de actuación conjunta para los próximos quince años. Además, permitirá la organización de dos grandes exposiciones anuales en el nuevo espacio museográfico BBK Museoa ideado por los arquitectos Norman Foster y Luis María Uriarte dentro del proyecto Agravitas para la ampliación y reforma del museo.

El arquitecto Norman Foster no quiso perderse ayer este "nuevo hito para el museo", según lo definió Miguel Zugaza, y avanzó también algunas de las novedades del proyecto de ampliación, cuyas obras comenzarán a acometerse el próximo mes de septiembre.

Terraza al aire libre

Así, según explicó Foster, el nuevo espacio BBK Museoa se convertirá en una sala de exposiciones temporales de 1.500 metros cuadrados que conectará a través de un óculo con las dependencias de la entreplanta destinadas a las actividades educativas y de difusión.

Será, por tanto, una nueva galería capaz de albergar valiosas experiencias de contemplación artística, conocimiento y aprendizaje. El arquitecto adelantó que BBK Museoa se abrirá a una terraza al aire libre que aportará 700 metros cuadrados adicionales para realizar exposiciones de escultura.

Foster explicó que cuando presentó el proyecto a concurso, "no veía la necesidad de abrir una terraza, ha surgido del diálogo; hemos realizado numerosos bocetos. Generará más espacio delante de los volúmenes de la ampliación, y dotará de esbeltez al nuevo edificio. Es como un piso, si te dan a elegir con terraza o sin terraza, eliges con ella. Además, se puede dar una gran variedad de usos, aunque en esta ocasión se convertirá en una galería para exponer obras de arte".

"Para redescubrir el futuro hemos mirado al pasado", añadió el arquitecto aportando más detalles. Por ello, "mantendremos la escalera histórica del edificio original, de 1945, pero nos permitirá poder mirar hacia el patio. Bajo ella se abrirá un hueco para que los visitantes puedan acceder a la nueva galería diáfana que, si la ocasión lo requiere, se podrá dividir en espacios más pequeños". Esta nueva galería estará coronada por una ventana redonda de cristal u óculo, que permitirá a los visitantes ver los distintos pisos que hay encima de la misma, según precisó Foster.

Como ya estaba previsto, se mantiene la recuperación de la entrada histórica del museo como nuevo acceso único a la pinacoteca por la actual Plaza Euskadi.

Dos lucernarias aportarán la luz a la galería principal, que tendrá 29 metros de ancho, en lugar de 25, y luz diáfana. "Utilizaremos acero ecológico, producido con energías renovables, por lo que produce menos emisiones", adelantó Foster. El óculo central permitirá ver los diferentes pisos, en torno a la escultura actual. "Y desde el parque, parecerá que casi flota la cuarta planta desde encima del edificio histórico".

Vidrio blanco

En cuanto al recubrimiento del edificio, se han barajado varios materiales. Foster buscaba un tono muy ligero, que funcionara con la luz exterior del entorno natural. En ese sentido, ayer anunció que probablemente se decante por un vidrio blanco, con tonalidades rosáceas y transparente, con el objetivo de "darle continuidad a lo que ya existe", ya que el cristal tiene gran presencia en los edificios ya existentes.

"Los espacios y salas ya existentes se van a rediseñar, con lo que se conseguirá ampliarlos", añadió.

El objetivo de las instituciones vascas que impulsan el proyecto es iniciar las obras en septiembre e inaugurar el nuevo museo en julio de 2023.

Se mantendrá el modelo de financiación previsto en el Plan estratégico del museo, que consistirá en la formalización de un préstamo a largo plazo suscrito por la Fundación de 25 millones, que será amortizado por las aportaciones de las tres instituciones fundadoras del museo: Ayuntamiento de Bilbao, Diputación y Gobierno vasco. La ampliación permitirá mantener abierta una parte importante del edifico antiguo del museo, al que se podrá acceder desde su entrada original, donde se habilitará una rampa provisional para facilitar la accesibilidad.

Mecenas

Y en esta nueva etapa, tal y como se constató ayer, la BBK será compañera inseparable del Bellas Artes. El presidente de BBK, Xabier Sagredo, aseguró que renovar este nuevo convenio de colaboración para los próximos 15 años "demuestra la confianza que tenemos en este proyecto, que viene de lejos. Estampamos la firma casi conlos ojos cerrados, convencidos además con este proyecto de ampliación sostenible y con futuro, que perdurará en el tiempo adaptándose a las nuevas necesidades que requiera la sociedad". "Ha llegado un momento importante para el museo, y con este convenio hacemos una aportación extra de calcio al esqueleto de este vigoroso museo; queremos que siga vivo y que cumpla otros 110 años", añadió Sagredo.

El alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, por su parte, explicó que el nuevo convenio pone de relieve "que no estábamos equivocados cundo apostamos por este proyecto de ampliación. Bilbao no es un proyecto acabado, crece y evoluciona, tiene presente y futuro. Y este proyecto es un buen ejemplo de transformación a través de la cultura. Este convenio es la mejor prueba de colaboración entre instituciones y BBK, que es la mayor mecenas cultural que tiene el territorio de Bizkaia".

Aburto destacó además del respeto del proyecto de ampliación a la arquitectura existente y al entorno, "también las posibilidades que nos van a ofrecer estos nuevos espacios y la nueva experiencia que va a suponer ese nuevo mirador, esa nueva terraza, que aparece al aire libre como una solución magnífica de crecer, con capacidad expositiva".Una alianza firme

La alianza entre BBK y Bellas Artes dio comienzo a finales de los años setenta del pasado siglo, se amplió en 1994 con la creación de la Sala BBK y tuvo su respaldo decisivo en 2001 con la adhesión de BBK como Patrono de Honor y miembro del Comité Ejecutivo del museo junto con las tres instituciones fundadoras. Es en ese año -en el que, además, se constituye la Fundación Museo de Bellas Artes de Bilbao- cuando se establece el Programa BBK Museo que en este tiempo ha dado cobertura al marco de actuación conjunta.

A lo largo de estos años el desarrollo de actividades de interés general se ha materializado en el programa artístico de mayor dimensión en el museo con el apoyo de una entidad privada y que respalda tres programas principales -exposiciones temporales, actividades educativas y difusión-, que han protagonizado la acción cultural en el territorio y su representación en un contexto artístico más amplio.

El grueso del programa expositivo del museo, que se realiza, precisamente, gracias a la colaboración con BBK, tiene como objetivo prioritario dar a conocer al público artistas, periodos o episodio srelevantes en la historia del arte.